Los diez cardenales más jóvenes de la Iglesia.

Los diez cardenales más jóvenes del Sacro Colegio están llamados a jugar un importante papel en la Iglesia. Salvo muerte imprevista de alguno de ellos todos van a participar en el cónclave que elegirá en su día, Dios quiera que lejano, al sucesor de Benedicto XVI. Por imperativos de la edad. Y llegarán, además, con una ya amplia experiencia cardenalicia. Van a ser, sin duda, figuras importantes en el próximo cónclave.

El más joven de todos es el húngaro Peter Erdö, arzobispo de Estzergom-Budapest. El 25 de junio cumplirá 56 años. Le quedan veinticuatro años de elector y no es verosímil que Benedicto XVI alcance los 104 años de edad. Lleva ya tiempo siendo el benjamín del Sacro Colegio porque fue creado cardenal por Juan Pablo II en el consistorio de 2003. Ninguno de los cardenales de las dos promociones de Benedicto XVI eran más jóvenes que él. No ha tenido mucha presencia mediática por lo que no me atrevo a pronunciarme sobre él.

Le sigue en edad el francés Philippe Barbarin, arzobispo de Lyon que el 17 de octubre cumplirá 58 años. Llegó al cardenalato, también creado por Juan Pablo II en 2003, con fama de tradicionalista que después se ha ido aguando un tanto. Seguro que va a ser figura importante en el próximo cónclave y de los que los periodistas aventurarán como papabile. Sus próximos años van a ser decisivos para concretar su figura.

El tercer cardenal más joven es ya de creación de Benedicto XVI. El brasileño Odilo Pedro Scherer, arzobispo de Sâo Paulo a quien el Papa creó cardenal en 2007. Conservador en principio pero todavía tendrá que manifestarse. Cumplirá 59 años el 21 de septiembre.

El norteamericano Daniel Nicholas di Nardo, arzobispo de Galveston-Houston, cumplirá también 59 años el 23 de mayo. Fue una de las sorpresas del consistorio de Benedicto XVI en 2007. Llega con vitola de tradicional.

Ya con 59 años cumplidos tenemos al croata Josip Bozanic, arzobispo de Zagreb. Creado cardenal por Juan Pablo II en 2003. Goza de prestigio entre los obispos europeos que le han elegido para el Consejo postsinodal en 1999 y vicepresidente del Consejo de las Conferencias Episcopales europeas en 2001. Pasa por tradicional.

Con esos mismos años viene ahora el mejicano Francisco Robles Ortega, arzobispo de Monterrey. Fue creado cardenal por Benedicto XVI en su último consistorio (2007). Todavía no se ha acreditado a nivel universal. Tal vez algún amigo mejicano nos precise algo más sobre su personalidad.

El ghanés Peter Kodwo Appiah Turkson, arzobispo de Cape Coast cumplirá 60 años el 11 de octubre. No sé nada de él. Y en Ghana supongo que no tendremos lectores. Fue creado cardenal por Juan Pablo II en el consistorio de 2003.

Cumplirá 63 años el 10 de octubre el cardenal español Antonio Cañizares, arzobispo de Toledo, elevado a la púrpura por Benedicto XVI en su primer consistorio. Es, hoy por hoy, el septimo cardenal más joven del Sacro Colegio. Creo que no es necesario añadir nada sobre su persona.

Vinko Puljic, arzobispo de Vrhbosna, Bosnia Herzegovina, cumplirá 63 años el 8 de septiembre. Supongo que su nombramiento se ha debido, sobre todo, a amparar su figura en tan difícil y trágica nación. Y con él al precario catolicismo bosnio.

Stanislaw Rylko es un curial polaco, herencia de Juan Pablo II, que cumplirá 63 años el 4 de julio. El Papa anterior le nombró presidente del Pontificio Consejo para los Laicos y Benedicto XVI le creó cardenal en su último consistorio.

Pues estos son, de momento, los diez cardenales más jóvenes de la Iglesia. Y tienen muchos años por delante. De servicio a la Iglesia y de intervención segura, salvo algún imprevisto, en el próximo cónclave.

De momento ninguno parece que si mañana tuviéramos elección pontificia, fueran a ser grandes electores o papabiles. Están todavía verdes. Pero muy posiblemente dentro de algunos años esté ya alguno en sazón.
Volver arriba