Una obra en tres tomos fruto de 10 años de trabajo “La verdad los hará libres”: El esfuerzo de la Iglesia para comprender mejor la Dictadura argentina
La obra es fruto del trabajo de la Facultad de Teología de la Universidad Católica Argentina, de “un equipo de docentes e investigadores que se abocaron a escrutar los archivos por primera vez accesibles”
“Ser un aporte a la historiografía argentina en orden a comprender mejor un periodo tan doloroso de nuestra historia reciente”
"Exhortamos a quienes tengan datos sobre el paradero de niños robados, o conozcan lugares de sepultura clandestina, que se reconozcan moralmente obligados a acudir a las autoridades pertinentes”
"Exhortamos a quienes tengan datos sobre el paradero de niños robados, o conozcan lugares de sepultura clandestina, que se reconozcan moralmente obligados a acudir a las autoridades pertinentes”
Luis Miguel Modino, corresponsal de RD en América Latina y Caribe
La reciente publicación del primer tomo de “La verdad los hará libres”, una obra pensada en tres tomos que es “el fruto de un largo proceso de sistematización e investigación impulsado por la Conferencia Episcopal Argentina, con la colaboración de organismos de la Santa Sede, que comenzó en el año 2012 con la clasificación de la documentación existente en torno a la década del 70 del siglo pasado y custodiada en los archivos de la Conferencia Episcopal y de la Santa Sede”, ha llevado a la Conferencia Episcopal Argentina a escribir una carta de presentación.
Nunca se avanza sin memoria
El escrito comienza citando el número 249 de la Fratelli tutti, donde el Papa Francisco dice que “Es fácil hoy caer en la tentación de dar vuelta la página diciendo que ya hace mucho tiempo que sucedió y que hay que mirar hacia adelante. ¡No, por Dios! Nunca se avanza sin memoria, no se evoluciona sin una memoria íntegra y luminosa. Necesitamos mantener viva la llama de la conciencia colectiva, testificando a las generaciones venideras el horror de lo que sucedió que despierta y preserva de esta manera el recuerdo de las víctimas, para que la conciencia humana se fortalezca cada vez más contra todo deseo de dominación y destrucción”.
La obra es fruto del trabajo de la Facultad de Teología de la Universidad Católica Argentina, de “un equipo de docentes e investigadores que se abocaron a escrutar los archivos por primera vez accesibles”. En el primer tomo ya publicado, “ofrece un marco de comprensión de la realidad social y eclesial argentina en la segunda mitad del siglo XX deteniéndose tanto en las concepciones teóricas como en las acciones concretas que alimentaron las diversas formas de conflictividad y violencia”.
En relación al segundo, que verá la luz próximamente, la carta de la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina dice que “afronta las vicisitudes y contradicciones de la Iglesia católica durante los años del llamado Proceso de Reorganización Nacional con la intención de revelar, de forma cronológica e integral, todo el ciclo de los acontecimientos desde el Golpe de Estado de 1976 hasta el regreso a la democracia en 1983”. Por su parte, “el tercero ofrecerá una serie de ensayos con diversas lecturas teológicas e históricas acerca de lo sucedido en aquel tiempo”.
Comprender mejor un periodo tan doloroso de la historia argentina
El objetivo de la obra es “ser un aporte a la historiografía argentina en orden a comprender mejor un periodo tan doloroso de nuestra historia reciente”. En ese sentido, la carta dice que “la Conferencia Episcopal Argentina, consciente de su misión de servir a la sociedad, ha querido primeramente ordenar y clasificar sus archivos en orden a hacerlos asequibles a aquellos que, cumpliendo debidamente la reglamentación vigente, quisieran escrutar con honestidad intelectual las fuentes en orden a historiar científicamente un periodo difícil de la vida argentina”.
Un trabajo encargado a especialistas con el que se quiere cumplir lo dicho en 2012: “Nos sentimos comprometidos a promover un estudio más completo de esos acontecimientos, a fin de seguir buscando la verdad, en la certeza de que ella nos hará libres (cf Jn 8,32)”. Desde el episcopado se recalca que “de nuestra parte hemos colaborado con la justicia, cuando se nos solicitó información, de la cual podamos disponer. Además, exhortamos a quienes tengan datos sobre el paradero de niños robados, o conozcan lugares de sepultura clandestina, que se reconozcan moralmente obligados a acudir a las autoridades pertinentes”. Algo que es visto como oportunidad “para lograr que en nuestra Patria crezca la paz y la justicia”.