El sucesor de Giussani obedece al Papa Francisco Julián Carrón cede y anuncia su marcha de la presidencia de Comunión y Liberación
Para “favorecer que el cambio de liderazgo al que estamos llamados por el Santo Padre se produzca con la libertad que requiere este proceso”
Julián Carrón, elegido directamente como sucesor por don Giussani, ha optado, finalmente, por no ir a la guerra total con Roma, y ha anunciado su dimisión al frente de Comunión y Liberación
El gesto intenta evitar que Francisco intervenga todo CL como ya hiciera con los 'Memores Domini'
"Deseo que viváis esta ocasión como una oportunidad para el crecimiento de la autoconciencia eclesial, para seguir dando testimonio de la gracia del carisma dado por el Espíritu Santo a don Giussani, que hace de Cristo un verdadero, persuasivo. y presencia decisiva, que nos ha investido y arrastrado dentro, una corriente de vida nueva"
El gesto intenta evitar que Francisco intervenga todo CL como ya hiciera con los 'Memores Domini'
"Deseo que viváis esta ocasión como una oportunidad para el crecimiento de la autoconciencia eclesial, para seguir dando testimonio de la gracia del carisma dado por el Espíritu Santo a don Giussani, que hace de Cristo un verdadero, persuasivo. y presencia decisiva, que nos ha investido y arrastrado dentro, una corriente de vida nueva"
En más de una ocasión, los 'cielinos' se lamentan, preguntándose qué hubiera sucedido si, como se preveía, el cardenal Scola hubiera sido elegido Papa en lugar de Bergoglio. Esa ocasión ya no se dará (el purpurado ya ha sobrepasado los 80 años, y no podría participar en un cónclave. Uno de sus mayores aliados, Julián Carrón, elegido directamente como sucesor por don Giussani, ha optado, finalmente, por no ir a la guerra total con Roma, y ha anunciado su dimisión al frente de Comunión y Liberación.
El enfrentamiento, que duró varias semanas, vino tras la publicación de nuevas normas para los movimientos y realidades eclesiales, que pretendían evitar que los líderes se acantonasen eternamente en sus puestos. Carrón, que consideraba que el hecho de haber sido designado por el fundador le libraba de someterse a las normas del Dicasterio de Laicos, Familia y Vida, tensó la cuerda hasta el extremo, pero Roma se mantuvo firme.
Carrón, incluso, se negó a participar de un encuentro del Papa con los líderes de movimientos celebrado el pasado 16 de septiembre. La intervención de las 'Memores Domini' terminó por hacer entender a Carrón que, después de dos pontificados, su organización había dejado de ser intocable. Y se resignó. "Tomo esta decisión para favorecer que el cambio de liderazgo al que estamos llamados por el Santo Padre se produzca con la libertad que requiere este proceso", se justifica en una nota.
En realidad, su paso atrás es la última concesión para evitar que Francisco comisione a toda Comunión y Liberación, algo que, hoy por hoy, no se descarta. "Ha sido un honor para mí - continúa Carrón - ejercer este servicio durante años, un honor que me llena de humillación por mis limitaciones y si he fallado con alguno de ustedes (...). Deseo que viváis esta ocasión como una oportunidad para el crecimiento de la autoconciencia eclesial, para seguir dando testimonio de la gracia del carisma dado por el Espíritu Santo a don Giussani, que hace de Cristo un verdadero, persuasivo. y presencia decisiva, que nos ha investido y arrastrado dentro, una corriente de vida nueva", culmina. Una 'vida nueva' que ahora, por fin, podrá entrar en CL.
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