| RD/Agencias
El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, declaró que no está en contra de una posible visita del papa Francisco al país, y que lo habló con él en una reciente entrevista, que no ha sido confirmada por la Santa Sede. Bielorrusia y el Vaticano viven una crisis diplomática, después de que Lukashenko expulsara del país al arzobispo Tadeusz Kondrusiewicz, al que retiró la nacionalidad.
"No estoy en contra de que el papa Francisco, por no hablar de nuestro patriarca y los demás, lleguen a nuestro país. Pero debe haber un consenso sobre este tema, no debe causar un cisma irreparable", dijo Lukashenko, citado por la agencia Belta.
El presidente añadió que no quiere "encontrarse entre la espada y la pared y crear algún inconveniente".
"Hay muchos rumores sobre la visita del papa Francisco… Quiero que conozcan mi posición y la sociedad necesita escucharla: el papa Francisco es jefe de Estado y de la Iglesia, por lo tanto la invitación debe hacerse por parte del jefe de Estado y de la Iglesia Ortodoxa, con la que los católicos tienen muchos problemas", agregó, precisando que abordó este tema con Bergoglio, y que éste reaccionó con comprensión.
Por otro lado, ambos países siguen negociando el concordato, según apuntó el nuevo Nuncio en Bielorrusia, Ante Jozic, que hoy entregó sus cartas credenciales al jefe de Estado.
“El desarrollo del concordato (convenio) comenzó hace mucho. Continuará”, aseguró a preguntas de los medios, incidiendo en que "mi presencia aquí favorecerá la consolidación de los valores morales y espirituales”.