No se ha manejado ninguna hipótesis de desenlace fatal, o incapacidad, muchísimo menos cognitiva El Papa no piensa renunciar porque tiene "mucho por hacer"

La ventana de la planta 10 del Gemelli
La ventana de la planta 10 del Gemelli

Esta es la certeza que se respira entre la poca gente que ha estado en contacto directo con la planta 10 del Policlínico Gemelli y que, unido a las noticias que se han ido dando a lo largo del día, ponen mucha más luz a la situación médica del Papa Francisco

Pese a todo, Francisco aún habrá de permanecer unos días en el hospital, y seguir estrictamente con los consejos médicos, muy pendientes de cualquier oscilación en su estado de salud, y de cómo evoluciona tanto la bronquitis como, especialmente, la neumonía detectada este martes

El Papa tiene el ánimo bueno, y de lo que se confirma a nivel clínico no hay posibilidad de renuncia porque Francisco tiene "mucho por hacer". Esta es la certeza que se respira entre la poca gente que ha estado en contacto directo con la planta 10 del Policlínico Gemelli y que, unido a las noticias que se han ido dando a lo largo del día, ponen mucha más luz a la situación médica del Papa Francisco.

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Así, tal y como ha podido confirmar RD de fuentes directas, el parecer de los médicos es mucho más alentador que la víspera. Así, se quiere dejar claro que no se ha manejado ninguna hipótesis de desenlace fatal, o incapacidad, muchísimo menos cognitiva, como algunos habrían llegado a especular. Para muestra, los hechos: el Papa camina, respira por sí solo, lee y responde a los mensajes. Además, ha recibido a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, que avala el "buen humor" de Francisco. 

"No hay ningún pronóstico de incapacidad grave para el Papa", aseguran quienes están en contacto directo con el pontífice, que echan por tierra cualquier posibilidad de renuncia ahora, o en el futuro, planteando que Francisco todavía tiene muchos años por delante "y mucho por hacer".

Unas palabras de optimismo que, a buen seguro, animarán a los millones de fieles de todo el mundo que, preocupados, rezan por el restablecimiento del Papa. Un Papa que, pese a todo, aún habrá de permanecer unos días en el hospital, y seguir estrictamente con los consejos médicos, muy pendientes de cualquier oscilación en su estado de salud, y de cómo evoluciona tanto la bronquitis como, especialmente, la neumonía detectada este martes. 

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