¿De qué nos habló Benedicto XVI? ¿Qué desafíos afrontó?

Preguntaba en el artículo anterior: ¿de qué nos hablará Benedicto XVI? ¿Qué desafíos afrontará? Y por mi cuenta seleccioné ocho posibles grandes temas, todo un arco-iris posible de graves desafíos que hoy tiene planteado el mundo y, por tanto, la Iglesia. ¿Cuál de ellos ha quedado iluminado y profundizado por la palabra de Benedicto XVI? Respondo después de reflexionar solamente sobre los dos primeros discursos: el primero en el aeropuerto y el segundo a los jóvenes con los breves mensajes en diferentes lenguas. Con satisfacción compruebo cómo Benedicto XVI ha planteado y respondido como él sabe hacerlo sobre estos desafíos: 4º El referente y la meta: Cristo y el Reino de Dios, presentes para humanizar el mundo.5ºProtagonistas: los cristianos, coherentes seguidores de Jesús. Me permito esquematizar en plan de fichero las respuestas del Papa anotando el discurso - homilía correspondiente. Como tema central: el seguimiento coherente a Jesucristo.


¿Qué fundamentos propone el Papa en estas alocuciones?Jesucristo es el Camino, la Verdad y la Vida. Para impulsar el compromiso de construir el Reino de Dios en el mundo, entre nosotros (1º Llegada).
El Maestro es, el único que conoce de verdad el camino del hombre hacia Dios, porque es Él quien lo ha abierto para nosotros, lo ha creado para que podamos alcanzar la vida auténtica (2º Homilía).

¿Cómo motiva al seguimiento?
Y saben que sin Dios sería arduo afrontar esos retos y ser verdaderamente felices, volcando para ello su entusiasmo en la consecución de una vida auténtica. Pero con Él a su lado, tendrán luz para caminar y razones para esperar, no deteniéndose ya ante sus más altos ideales, que motivarán su generoso compromiso por construir una sociedad donde se respete la dignidad humana y la fraternidad real (1º Llegada)..
Se preguntarán por el secreto de vuestra vida y descubrirán que la roca que sostiene todo el edificio y sobre la que se asienta toda vuestra existencia es la persona misma de Cristo, vuestro amigo, hermano y Señor, el Hijo de Dios hecho hombre, que da consistencia a todo el universo. (2º Homilía)..
Él os ama desde siempre y os conoce mejor que nadie (Mensaje).
Tendremos nuevamente esta experiencia: es Él quien da verdadero sentido a nuestra vida (Mensaje)..

¿Qué obstáculos y dificultades enumera?
La superficialidad, el consumismo y el hedonismo imperantes, tanta banalidad a la hora de vivir la sexualidad, tanta insolidaridad, tanta corrupción (1º Llegada)..
Subsisten tensiones y choques abiertos en tantos lugares del mundo, incluso con derramamiento de sangre. La justicia y el altísimo valor de la persona humana se doblegan fácilmente a intereses egoístas, materiales e ideológicos. No siempre se respeta como es debido el medio ambiente y la naturaleza, que Dios ha creado con tanto amor (1º Llegada).
Muchos jóvenes, además, miran con preocupación el futuro ante la dificultad de encontrar un empleo digno, o bien por haberlo perdido o tenerlo muy precario e inseguro. Hay otros que precisan de prevención para no caer en la red de la droga, o de ayuda eficaz, si por desgracia ya cayeron en ella (1º Llegada)..
No pocos, por causa de su fe en Cristo, sufren en sí mismos la discriminación, que lleva al desprecio y a la persecución abierta o larvada que padecen en determinadas regiones y países. Se les acosa queriendo apartarlos de Él, privándolos de los signos de su presencia en la vida pública, y silenciando hasta su santo Nombre (1º Llegada)..
Hay palabras que solamente sirven para entretener, y pasan como el viento; otras instruyen la mente en algunos aspectos; las de Jesús, en cambio, han de llegar al corazón, arraigar en él y fraguar toda la vida. Sin esto, se quedan vacías y se vuelven efímeras. No nos acercan a Él. Y, de este modo, Cristo sigue siendo lejano, como una voz entre otras muchas que nos rodean y a las que estamos tan acostumbrado (2º Homilía).
contrariamente a quien edifica sobre arena, tal vez en un paraje paradisíaco, podríamos decir hoy, pero que se desmorona con el primer azote de los vientos y se convierte en ruinas (2º Homilía)..
mostrando una alternativa válida a tantos como se han venido abajo en la vida, porque los fundamentos de su existencia eran inconsistentes (2º Homilía)..
Estas tentaciones siempre están al acecho. Es importante no sucumbir a ellas, porque, en realidad, conducen a algo tan evanescente como una existencia sin horizontes, una libertad sin Dios (2º Homilía)

¿Qué respuestas dar ante el seguimiento?
Para exhortar a los jóvenes a encontrarse personalmente con Cristo Amigo y así, radicados en su Persona, convertirse en sus fieles seguidores y valerosos testigos (1º Llegada).
Pero yo vuelvo a decir a los jóvenes, con todas las fuerzas de mi corazón: que nada ni nadie os quite la paz; no os avergoncéis del Señor. Él no ha tenido reparo en hacerse uno como nosotros y experimentar nuestras angustias para llevarlas a Dios, y así nos ha salvado (1º Llegada).
En este contexto, es urgente ayudar a los jóvenes discípulos de Jesús a permanecer firmes en la fe y a asumir la bella aventura de anunciarla y testimoniarla abiertamente con su propia vida. Un testimonio valiente y lleno de amor al hombre hermano, decidido y prudente a la vez, sin ocultar su propia identidad cristiana, en un clima de respetuosa convivencia con otras legítimas opciones y exigiendo al mismo tiempo el debido respeto a las propias (1º Llegada).
Sí, hay muchos que, creyéndose dioses, piensan no tener necesidad de más raíces ni cimientos que ellos mismos. Desearían decidir por sí solos lo que es verdad o no, lo que es bueno o malo, lo justo o lo injusto; decidir quién es digno de vivir o puede ser sacrificado en aras de otras preferencias; dar en cada instante un paso al azar, sin rumbo fijo, dejándose llevar por el impulso de cada momento (2º Homilía)..
Nosotros, en cambio, sabemos bien que hemos sido creados libres, a imagen de Dios, precisamente para que seamos protagonistas de la búsqueda de la verdad y del bien, responsables de nuestras acciones, y no meros ejecutores ciegos, colaboradores creativos en la tarea de cultivar y embellecer la obra de la creación. Dios quiere un interlocutor responsable, alguien que pueda dialogar con Él y amarle.
Queridos amigos: sed prudentes y sabios, edificad vuestras vidas sobre el cimiento firme que es Cristo. Esta sabiduría y prudencia guiará vuestros pasos, nada os hará temblar y en vuestro corazón reinará la paz. Entonces seréis bienaventurados, dichosos, y vuestra alegría contagiará a los demás (2º Homilía)..
Buscar sobre todo la Verdad que no es una idea, una ideología o un eslogan, sino una Persona, Cristo, Dios mismo que ha venido entre los hombres. Tenéis razón de querer enraizar vuestra fe en Él, y fundar vuestra vida en Cristo (Mensaje)..
Poned en Cristo el fundamento de vuestras vidas. Arraigados y edificados en él, firmes en la fe y abiertos al poder del Espíritu, encontraréis vuestro puesto en el plan de Dios y enriqueceréis a la Iglesia con vuestros dones (Mensaje)..
Abramos nuestro corazón a Cristo. Que aquí en Madrid Él nos conceda un tiempo colmado de gozo y bendición (Mensaje).
Subir hasta la fuente eterna de vuestra juventud y conocer al protagonista absoluto de esta Jornada Mundial y, espero, de vuestra vida: Cristo Señor (Mensaje)..

¿Con qué recursos cuenta el cristiano?Jornada, tienen una ocasión privilegiada para poner en común sus aspiraciones, intercambiar recíprocamente la riqueza de sus culturas y experiencias, animarse mutuamente en un camino de fe y de vida, en el cual algunos se creen solos o ignorados en sus ambientes cotidianos (1º Llegada)..
Pero no, no están solos. Muchos coetáneos suyos comparten sus mismos propósitos y, fiándose por entero de Cristo, saben que tienen realmente un futuro por delante y no temen los compromisos decisivos que llenan toda la vida (1º Llegada).
Por eso me causa inmensa alegría escucharlos, rezar juntos y celebrar la Eucaristía con ellos. La Jornada Mundial de la Juventud nos trae un mensaje de esperanza, como una brisa de aire puro y juvenil, con aromas renovadores que nos llenan de confianza ante el mañana de la Iglesia y del mundo (1º Llegada).
Queridos jóvenes, escuchad de verdad las palabras del Señor para que sean en vosotros «espíritu y vida» (Jn 6,63), raíces que alimentan vuestro ser, pautas de conducta que nos asemejen a la persona de Cristo, siendo pobres de espíritu, hambrientos de justicia, misericordiosos, limpios de corazón, amantes de la paz (2º Homilía).
Hacedlo cada día con frecuencia, como se hace con el único Amigo que no defrauda y con el que queremos compartir el camino de la vida. Bien sabéis que, cuando no se camina al lado de Cristo, que nos guía, nos dispersamos por otras sendas, como la de nuestros propios impulsos ciegos y egoístas, la de propuestas halagadoras pero interesadas, engañosas y volubles, que dejan el vacío y la frustración tras de sí (2º Homilía).
Aprovechad estos días para conocer mejor a Cristo y cercioraros de que, enraizados en Él, vuestro entusiasmo y alegría, vuestros deseos de ir a más, de llegar a lo más alto, hasta Dios, tienen siempre futuro cierto, porque la vida en plenitud ya se ha aposentado dentro de vuestro ser (2º Homilía)..
Hacedla crecer con la gracia divina, generosamente y sin mediocridad, planteándoos seriamente la meta de la santidad. Y, ante nuestras flaquezas, que a veces nos abruman, contamos también con la misericordia del Señor, siempre dispuesto a darnos de nuevo la mano y que nos ofrece el perdón en el sacramento de la Penitencia (2º Homilía).
Por Cristo lo podemos conseguir verdaderamente y, arraigados en Él, damos alas a nuestra libertad. ¿No es este el gran motivo de nuestra alegría? ¿No es este un suelo firme para edificar la civilización del amor y de la vida, capaz de humanizar a todo hombre? (2º Homilía).
Que estas jornadas llenas de oración, enseñanza y encuentros, os ayuden a descubrirlo para amarlo más. Que Cristo os acompañe durante este tiempo intenso en el que todos juntos lo celebreramos y le rezaremos (Mensaje).
Recemos unos por otros, para que hoy y siempre seamos testigos gozosos de Cristo. Que Dios os bendiga (Mensaje).
Vivid estos días con espíritu de oración intensa y de fraternidad, dando testimonio de la vitalidad de la Iglesia en Italia, de las parroquias, asociaciones, movimientos. Compartid con todos esta riqueza (Mensaje)..
En estos días, escucharéis resonar personalmente su Palabra. Dejad que esta Palabra entre y eche raíces en vuestros corazones y, sobre ella, edificad vuestra vida (Mensaje)..
Firmes en la fe, seréis un eslabón en la gran cadena de los fieles. No se puede creer sin estar amparado por la fe de los demás, y con mi fe contribuyo también a ayudar la fe de los demás. La Iglesia necesita de vosotros y vosotros tenéis necesidad de la Iglesia (Mensaje).
días de oración y de fortalecimiento de vuestros lazos con Jesús. Que os guíe el Espíritu de Dios (Mensaje).
Encomiendo los frutos de esta Jornada Mundial de la Juventud a la Santísima Virgen María, que supo decir «sí» a la voluntad de Dios, y nos enseña como nadie la fidelidad a su divino Hijo, al que siguió hasta su muerte en la cruz (2º Homilía).
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