De nuevo parece ser noticia el tema del celibato a raíz de los cientos de casos denunciados en varios países por pederastia.
El celibato parece ser uno de los temas más estudiados y delicados a tratar. Solo en España hay unos 6000 curas casados que defienden el celibato opcional. La reflexión gira en torno a la imposición como parte obligatoria para formar parte del sacerdocio ministerial en la Iglesia, ya que no existe ningún fundamento ni en la Biblia, ni en la tradición ni en la teología.
Este punto obliga a tener que dejar el sacerdocio a muchos que se sienten vocacionados y no lo harían si pudieran compatibilizar ambas opciones.
Algunos están convencidos de que en medio siglo será abolido, pero lo cierto es que ni durante este papado ni posiblemente durante el siguiente, se producirá ese cambio.
En el Sínodo de Obispos celebrado en 2005, los prelados optaron por la necesidad de seguir con el celibato, decisión que fue apoyada incluso por las Iglesias orientales quienes permiten la ordenación de sacerdotes casados.
Aunque los Obispos son conscientes de las necesidades actuales y de la falta de sacerdotes, consideran que la solución no está en abolir el celibato, ya que este es un don al que tu accedes libremente en la ordenación, pero la vida, con los años habla y si cada uno de los sacerdotes es sincero consigo mismo, posiblemente me de la razón, aunque no lo quieran apoyar públicamente.
Esto es algo que se estableció para los curas católicos en el año 1139 durante el Concilio de Letrán, sin embargo desde el siglo XV hasta la actualidad, se están levantando voces contra ello.
¿Por qué ser obligatorio? ¿Por qué no permitir que sea opcional? Quizá el tema económico, una vez más tenga mucho o algo que decir aquí…