Magnificat

¡Feliz sábado! Otro sábado al que llegamos, en este caso el último del mes de agosto, y otro magníficat que vamos escucharemos. Esta vez provendrá de un maestro italiano del siglo XX, que posiblemente no sea conocido por su faceta de compositor de música religiosa.

Hoy nos visita Goffredo Petrassi (1904-2003), compositor italiano nacido en la localidad de Zagarolo. Está considerado como uno de los compositores más relevantes de su país en la segunda mitad del siglo XX. Empezó a estudiar música en Roma y aprendió a tocar piano con Bustini, hasta que pudo matricularse en el Conservatorio de Santa Cecilia. En 1932 su carrera como compositor sufrió un espaldarazo al ganar los primeros premios. Tras centrarse en la música orquestal pasó luego a la vocal, mezclando sabiamente la polifonía con la armonía moderna. No tuvo demasiado interés por la ópera ni el ballet, algo que no pasaba con sus compositores compatriotas. Sí lo hizo por las técnicas del dodecafonismo, aunque solo para ordenar determinados patrones.
Disfrutemos de su Magnificat. Es una obra relativamente temprana compuesta entre 1939 y 1940 en la que se aprecian rastros de Stravinski. Su estilo es muy libre y destaca en la pieza el inicio orquestal, con una luminosa melodía de los violines. Luego escuchamos una polifonía de carácter ligero que nos recuerda a la música barroca, incluso en el tipo de contrapunto que usa. «Empecé a escribir el Magnificat en Venecia mientras era director musical [del Teatro La Fenice]. A la vez que me veía envuelto en la vida de un teatro de ópera, empecé a sentir una cierta urgencia de escribir algo se se pareciese a una ópera. En esa partitura particular me preocupé del carácter de la Virgen, lo que quería decir que tenía que encontrar el timbre vocal adecuado, y en esta elección influyó mi experiencia con las voces y los papeles dramáticos».
La interpretación es del Coro y la Orquesta del Teatro Regio de Turín dirigido por Gianandrea Noseda.