¡Feliz miércoles! La llamo italiana por calificarla de alguna forma, pero bien podría ser universal. Así es también el gran maestro que hoy nos acompañará proporcionándonos unos minutos de música que, siempre nos ocurre con él, nos sabrán a poco.

No es otro que Giovanni Pierluigi da Palestrina (1525 o 1526-1594), compositor italiano nacido en Palestrina y que falleció en Roma un 2 de febrero. En solo una vez firmó como il Palestrina y habitualmente lo hacía como Giovanni Petraloysio. Tuvo a su cargo diversos puestos, destacando el de maestro de música de la Capilla Julia del Vaticano. Fue un maestro muy influyente durante su época y en tiempos posteriores que compuso 104 misas y más de 300 motetes. La música tiene un hito en su nombre puesto que es considerado el gran renovador del estilo polifónico europeo y uno de los paladines de la Contrarreforma musical llevada a cabo tras el Concilio de Trento. Debido a su importancia capital en la música se me ocurre que es como un apóstol Pedro de la Iglesia para la música. Se lo que fuere, casi todos los calificativos se nos acaban cuando hablamos de Palestrina.

Una de sus obras es la Misa Veni Sponsa Christi. Se basada en el motete del mismo título también de nuestro maestro, y la misa de hoy está escrita a cuatro voces. El compositor hace un uso avanzado de la tonalidad, casi mirando más a lo que vendría en un futuro. Organiza el material temático de una forma cíclica puesto que vuelve al motete de referencia una y otra vez a lo largo de la obra. Busca un equilibrio entre los fragmentos con textos más largos (silábicos) con otros más breves (melismáticos). De la misa casi puede hacerse un libro y lo importante, más que eso, es disfrutar de esta composición inmortal. De ella vamos a escuchar su Sanctus y su Benedictus.

La interpretación es del Coro del St John's College de Cambridge dirigido por George Guest.