La tierra es del Señor



¡Feliz viernes! Acabamos esta semana laboral que también ha sido la siguiente a la solemnidad de Pentecostés. Repasando lo que tenemos ya vemos que ha estado presente la música española y, por tanto, lo que nos queda es disfrutar de música compuesta por una mujer. Vamos a ello y lo vamos a conseguir con una compositora casi mítica porque compuso poco (murió muy joven) pero dejó gran influencia en las generaciones posteriores. Alguna vez creo que ya ha aparecido por este rinconcito.



Me refiero a Lili Boulanger (1893-1918), compositora francesa nacida en París. Es evidente que recibió la influencia y la enseñanza de su hermana mayor Nadia. De hecho nació en el seno de una familia de músicos ya que su abuelo era chelista, su abuela una famosa soprano, su padre fue compositor y su madre una cantante profesional. Con dos años pasó un trágico episodio de neumonía que la dejó tocada para toda su vida ya que a partir de entonces sufría constantes enfermedades. En su casa nunca faltaban los compositores y Gabriel Fauré acudía a ella asiduamente. Precisamente fue este quien marcó la línea de compositor que debió seguir Lili, aunque también apreciamos la influencia de Debussy, aunque con unos toques impresionistas llenos de delicados colores. Su prematura muerte nos dejó huérfanos de una impresionante compositora, como prueban las composiciones que los legó.

La obra con la que nos vamos a maravillar se titula La terre appartient à l'Éternel, que no es sino el salmo 24. Fue compuesta en 1916, mientras residía en Roma, para coro, órgano y orquesta. La orquesta está integrada solo por metales, timbales y arpa, que interpretan bloques homofónicos en una obra que nos muestra el estilo poco convencional de esta mujer. La composición tiene tintes oscuros y guerreros, gracias a esa particular textura que consigue. Usa una armonía abiertamente modal y recurre con frecuencia al diatonismo. Escuchamos sonidos arcaicos pero poderosos en una profunda plegaria al Altísimo.

La partitura de la composición puedes descargarla aquí.

La interpretación es del Coro Sinfónico de la BBC, la Orquesta Sinfónica de la BBC, Simon Preston al órgano y todos dirigidos por Nadia Boulanger.

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