“El ángel, entrando en su presencia, dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo».” (Lc 1, 28)
El texto de san Lucas no señala lugar concreto donde aconteció el anuncio del ángel Gabriel a María, pero señala que entró en su presencia. Se pueden imaginar diferentes espacios, como lo hacen los pintores, pero en todo caso, se puede afirmar que fue una experiencia interior.
“En la interior bodega
de mi amado bebí, y cuando salía,
por toda aquesta vega,
ya cosa no sabía
y el ganado perdí que antes seguía” (San Juan de la Cruz, Cántico).
“Mas habéis de entender que va mucho de estar a estar; que hay muchas almas que se están en la ronda del castillo que es adonde están los que le guardan, y que no se les da nada de entrar dentro ni saben qué hay en aquel tan precioso lugar ni quién está dentro ni aun qué piezas tiene. Ya habréis oído en algunos libros de oración aconsejar al alma que entre dentro de sí; pues esto mismo es” (M I, 1, 5).
Encuentro en el centro del castillo interior: “Oráculo del Señor, que extiende los cielos y cimienta la tierra, que forma el aliento del hombre en su interior” (Zac 12, 1)
Morada secreta: «El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él” (Jn 14, 23).
Haz memoria de acontecimientos interiores.