Alessandra Smerilli planteó sus críticas a las consecuencias económicas de la pandemia y se sumó al pedido de Francisco para construir un “nosotros” junto a migrantes y refugiados
Czerny: “¿Y si el individualismo egoísta y el aislacionismo se afianzasen aún más, dejando a los vulnerables y terriblemente marginados todavía más atrás?”
Al presentar el mensaje papal para la 107 Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado, la Santa Sede aprovechó para volver sobre sus críticas al sistema económico y retomó sus denuncias sobre la “especulación” del mundo de las finanzas.
“No es difícil ver en el ámbito económico este nosotros desfigurado y la pandemia lo ha hecho más evidente: las finanzas, que tienen como vocación original la inclusión, poner en contacto a los que tienen capital con los que quieren desarrollar proyectos y carecen de medios, se han convertido en la mayoría de los casos en pura especulación”, denunció hoy en conferencia de prensa la subsecretaria del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, Alessandra Smerilli.
“Pensemos en las operaciones especulativas sobre los productos alimenticios, que corren el riesgo de dejar a países enteros sin acceso a los alimentos a causa del aumento de los precios. Y los más pobres se ven obligados a emigrar”, criticó Smerilli este jueves.
“Pensemos en las crecientes desigualdades, económicas, tecnológicas y de acceso a la sanidad. Mientras la lógica imperante siga siendo: ‘qué es lo mejor para mí’ y no ‘cuál es mi parte en una acción que será lo mejor para todos nosotros y para nuestra casa común’, no será posible sanar una economía enferma”, agregó la religiosa designada en el organismo por el papa Francisco.
A su turno, el cardenal Michael Czerny planteó que “en Fratelli tutti, el Santo Padre expresaba claramente su preocupación por el futuro tras la crisis sanitaria”.
“¿Y si el individualismo egoísta y el aislacionismo se afianzasen aún más, dejando a los vulnerables y terriblemente marginados todavía más atrás?”, se pregnutó hoy el purpuado.
“Como él dice, podemos salir de la pandemia mejores o peores. Podemos aprender a ser mejores hermanos y hermanas, o podemos hundirnos más en la preocupación obsesiva sólo por nosotros mismos, lo nuestro", agregó luego.
