Berta Caro, elegida decana de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad de Extremadura Te lo mereces, Berta

Justo el 8 de marzo mi hermana pequeña, mujer y fisioterapeuta, triunfaste en un ámbito que sigue siendo esencialmente masculino y donde los médicos son mayoría. Los altibajos y esfuerzos de tu “campaña” se entreveraron con la penosa travesía de nuestro duelo, pero te mantuviste firme, con la esperanza en alto y jugando tus bazas con habilidad y talento. Te lo has ganado de principio a fin.
Y el día llegó. Y coincidió con el aniversario de Mamá, de su paso a la Luz, y no me cabe duda que tu éxito está conectado con su alegría eterna, y es un alivio en medio de este tiempo tan desolado. Sé que ella no hizo nada para ayudarte a conseguirlo, simplemente porque no lo necesitabas: te lo has ganado.
Bueno, realmente Mami sí que hizo mucho, desde años atrás: llevarte en su seno, darte a luz, su hija pequeña, la wincha dicen acá en la selva, siempre sospechamos que fue algo imprevisto, un “fallo técnico” que llegó con una sonrisa de oreja a oreja, y una especie de felicidad de serie: Bertorrogorda que juega a todas horas y todo le viene bien.
No fue nada difícil para Papá y ella sacarte adelante, porque resultaste ser la más lista de todos nosotros: estudiaste fisioterapia en Cádiz (era lo que te gustaba y te empeñaste), y luego biblioteconomía en Badajoz; aprendiste portugués -todavía me pongo en la playa el polo de Brasil que me trajiste de Curitiba hace 28 años y que solo tiene 4 estrellas- y lograste la licenciatura en Fisioterapia en Lisboa.
Pronto fuiste viendo que tu camino era la universidad, y para ello te mudaste con Pilu y el Licenciao mu chicos a Badajoz. No fue fácil criar a dos hijos y abrirte paso, pero trabajaste muchísimo, haciendo funcionar toda tu capacidad. Hasta que en 2010 te convertiste en la primera doctora en fisioterapia de Extremadura. Estuvimos a tu lado aquel día, ¿te acuerdas? Satisfechos, más anchos que panchos. Mamá la primera.
La vida siguió. Llegaron momentos difíciles, pero los superaste con tenacidad, convicción y siempre el apoyo de tu familia. Y después más metas, más deseos y propósitos alcanzados: profesora titular especializaciones en el método Vojta y Le Metáyer, amplia experiencia en fisioterapia en pediatría, formación en Concepto Bobath… todo lo canta el Google y a mí me suena un poco a chino.
Y hace unos años, vicedecana de estudiantes. Te atreviste a meterte en esa jungla de los departamentos universitarios, escenario de tácticas en busca del poder, la política que lo emponzoña todo, donde arrecian las zancadillas maquilladas con buenos modales. Pero tú sueñas una universidad mejor, de más calidad, con la persona del alumno en el centro. Y lo luchaste.
El año pasado, cuando yo estaba en España, conversábamos acerca de la posibilidad de presentarte a las elecciones a decana de la Facultad de Medicina. “¿Estás segura?”- recuerdo que te pregunté. No lo veíamos claro porque tendrías que enfrentarte a los médicos y también ganarte su voto, y sabemos lo del rodillo del corporativismo profesional. “Tú eres fisioterapeuta, ¿tienes alguna posibilidad?”
A ti te parecía que sí, y tu compañero Paco creyó en ti desde el principio, se nota que es brillante también. Estos meses se han entreverado los altibajos y esfuerzos de tu “campaña” con la penosa travesía de nuestro duelo, pero te has mantenido firme, con la esperanza en alto y jugando tus bazas con habilidad y talento. Supongo que te has mostrado tal y como eres ante colegas y alumnos, y como son todos sagaces y estudiaos, te han elegido con el 90% de los votos, ahí es nada.
Además ocurrió el 8 de marzo, día en que una mujer triunfó en un ámbito que sigue siendo esencialmente masculino. Fisioterapeuta y mujer, decana de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad de Extremadura, esa es mi hermana Berta. Hoy estamos todos contigo en tu toma de posesión, Mamá y yo incluidos. Felices por ti y sinceramente orgullosos. Te lo has merecido de principio a fin. No olvides que te queremos infinitamente, seas decana, runner, fan de Netflix o lasañista.