Disgusto e indignación en la comarca por la actitud del administrador apostólico 'Por Ávila' echa por tierra la declaración institucional de las Cortes de Castilla y León en favor de la Diócesis de Ciudad Rodrigo y un obispo residencial
En el último momento, el diputado Pedro José Pascual de 'Por Ávila' se opuso y la declaración no pudo aprobarse
Al procurador de 'Por Ávila' se le atribuye una supuesta amistad con el que fuera obispo de Ávila y ahora administrador apostólico de Ciudad Rodrigo, Jesús García Burillo, como causa de su negativa a apoyar la declaración
Vox solicita “al PP como proponente” de la declaración que “antes de dar por hecha nuestra firma al menos tenga la cortesía de hacérnosla llegar, para que podamos valorar su contenido”
En la actual coyuntura, sería de agradecer que el administrador apostólico, monseñor García Burillo, convocase una asamblea del pueblo de Dios que peregrina en Ciudad Rodrigo
Vox solicita “al PP como proponente” de la declaración que “antes de dar por hecha nuestra firma al menos tenga la cortesía de hacérnosla llegar, para que podamos valorar su contenido”
En la actual coyuntura, sería de agradecer que el administrador apostólico, monseñor García Burillo, convocase una asamblea del pueblo de Dios que peregrina en Ciudad Rodrigo
Estaba todo pactado entre los diferentes grupos políticos del arco parlamentario, para que las Cortes de Castilla y León aprobasen una declaración institucional, pidiendo el mantenimiento de la histórica diócesis de Ciudad Rodrigo con un obispo residencial. Pero, en el último momento, el diputado Pedro José Pascual de 'Por Ávila' se opuso y la declaración no pudo aprobarse, dado que una declaración institucional de este tipo sólo puede aprobarse por unanimidad.
Por lo tanto, la anunciada declaración institucional de apoyo de las Cortes castellanoleonesas se quedó en agua de borrajas, ante la evidente indignación de las demás fuerzas políticas, especialmente del partido socialista, que se había volcado en la iniciativa de la mano de su procurador Juan Luis Cepa.
En la ciudad y en toda la comarca hay un evidente enfado con 'Por Ávila' y con su procurador, al que le achacan una supuesta amistad con el que fuera obispo de Ávila y ahora administrador apostólico de Ciudad Rodrigo, Jesús García Burillo, como causa de su negativa a apoyar la declaración.
De ahí que también se extienda cada vez más en la diócesis el disgusto por la actuación en este tema del obispo García Burillo, al que muchos fieles y parte del clero le reprochan el que se haya alineado con las tesis de la fusión de Ciudad Rodrigo con Salamanca y no defienda a fondo el mantenimiento de la diócesis civitavense con un obispo “propio, exclusivo y residencial”, como pedía la declaración de los partidos políticos.
Tampoco parece estar muy clara la postura del PP de Ciudad Rodrigo, porque parece haber apoyado la declaración sólo de cara a la galería, pero sin implicarse a fondo. De hecho, a nuestra redacción llegó, ayer por la tarde, una nota de prensa de Vox de Castilla y León, en la que señala su “sorpresa e incredulidad, al comprobar mediante la prensa la 'unanimidad' de una Declaración Institucional sobre la que no se ha consultado ni as nuestra procuradora, Fátima Pinacho, ni de la que la Secretaría del Grupo Mixto nos ha informado”.
Por eso, Vox solicita “al PP como proponente” de la declaración que “antes de dar por hecha nuestra firma al menos tenga la cortesía de hacérnosla llegar, para que podamos valorar su contenido”.
En la actual coyuntura, sería de agradecer que el administrador apostólico, monseñor García Burillo, convocase una asamblea del pueblo de Dios que peregrina en Ciudad Rodrigo y consensuase con las bases católicas y con su clero las medidas a tomar ante la eventual desaparición de la diócesis. Lo lógico será debatir si es viable económica y pastoralmente la permanencia de una diócesis tan pequeña sobre todo porque sólo cuenta con 38.261 habitantes, 121 parroquias y 87 sacerdotes.
Y no no es viable, infórmese al pueblo de Dios y manténgase al tanto de la decisiones que le atañen, tanto respecto al mantenimiento de la diócesis como a la de un obispo residencial. Hace ya más de dos años que a los fieles de Ciudad Rodrigo se les viene tratando como menores de edad.
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