En pocos años se cumplirá el bimilenario de la venida de la Virgen en carne mortal a Zaragoza. Aquel milagroso acontecimiento dio origen a uno de los santuarios marianos más importantes del mundo al que millones de peregrinos acuden cada año buscando consuelo, protección y esperanza. La Virgen del Pilar, patrona de Hispanidad, es un símbolo de unidad y fe para los españoles y para todos aquellos que la veneran. Nadie como Jardiel par retratar la devoción de todo un pueblo: «En ti toda esperanza, todo aliento, en ti la vida toda… Dulce Señora mía, ¡Qué desgraciados son los que lo ignoran!»
A continuación incluimos la entrevista que realizamos al portavoz y responsable de culto y pastoral del Cabildo, José Antonio Calvo, en la que hablamos de los eventos religiosos que se han preparado desde la catedral basílica del Pilar, con tanto cariño, como cada año.
-Ya ha arrancado la tradicional novena, la Virgen del Pilar, concretamente lo hizo el jueves 3 de octubre. Cuéntanos en torno a qué temas están abordando estos días de novena.
-La novena de este año, y no podía ser de otro modo, es una preparación de la mano de la Virgen María para la celebración del jubileo ordinario de 2025. A través de distintos predicadores, ayer comenzamos con el vicario de pastoral de la Archidiocesis, D. Sergio Perez, se acercarán a nosotros capellanes y consiliarios de asociaciones filiales de caballeros y damas de N. S. del pilar, desde Pamplona, desde Calatayud, desde Huesca, desde Castellón y con la predicación también de algunos canónigos, de algunos capitulares, como D. Pedro José, D. Daniel Granada, D. Isidoro Miguel D. Joaquín Aguilar. Nos vamos preparando, como digo, con la Virgen para el gran Jubileo que se celebrará el año que viene.
-Y los temas son esos lugares y palabras de la Virgen, ¿verdad?
-Exacto. Vamos a ir recorriendo Nazaret, Belén, Galilea. Y tenemos las palabras de la Virgen, que son poquitas las que tenemos en el Evangelio, pero desde esa pregunta «¿Cómo podrás ser esto si no conozco varón?», hasta el «Hágase en mí según tu palabra» y terminando con el silencio de María: «María guardaba todas estas cosas contemplándolas en su corazón».
-Y estas novenas son a las ocho de la tarde en el altar mayor.
-Sí, todos los días, a las ocho de la tarde en el altar mayor, se comienza con unas preces a la Virgen del Pilar, respondiendo a cada una de ellas con la jaculatoria, «Bendita y alabada sea», y luego se cantan los gozos y comienza la misa con la predicación. Una horita, entre las ocho y las nueve. Hay una excepción, es una excepción muy importante y es el día 11 de octubre. Esa novena se adelanta a las siete en punto de la tarde, porque después ya viene el «claustro magno», que es una procesión muy bonita hasta la Santa Capilla desde el altar mayor, que presiden los infanticos de último curso para cantar allí la «salve» y el «himno». Es como decirle a la virgen, mira, ya estamos en tu día y estamos todos.
Desde el Cabildo queremos promover mucho la salve y este claustro magno, porque que se perdiese sería perder una costumbre de la víspera. Ojalá muchas familias, puedan acercarse muchos jóvenes, muchos niños, es verdad que competimos con el Espacio Zity con los conciertos de la plaza del Pilar, pero todo se puede hacer. En concreto, este día la salve solemne y el claustro magno son 20 minutos de mucha intensidad y de mucha alegría.
-Y llegamos al 12 de octubre, ¿cuéntanos las misas que se ofrecen de la catedral basílica del Pilar?
-Hay un horario muy amplio. La primera como siempre es a las cuatro y media de la mañana, en la madrugada, es la tradicional misa de infante. Y después ya celebramos misa a las seis, a las siete de la mañana, a las ocho, a las nueve, a las diez, a las once, a las doce, que va a ser la misa estacional.
En esta ocasión el arzobispo don Carlos ha invitado a presidir la misa de la fiesta al arzobispo de Pamplona, a don Florencio Roselló, que pertenece a la orden de la Merced y es natural de Alcorisa. Don Florencio está muy contento de poder venir a celebrar esta fiesta de la Virgen del Pilar. Y luego ya, por la tarde, hay misas a las cinco, a las seis, a las siete, a las ocho y a las nueve. Al mediodía, hay otras misas, pero son de grupos y peregrinaciones que vienen desde México, desde Filipinas… Queda la idea de lo importante que es las fiestas del Pilar en toda la Hispanidad.
-Y José Antonio, respecto al Rosario de Cristal, este año contaremos con la carroza que se rompió la año pasado, restaurada, la de la Reina de la Hispanidad.
-Sí, ya estaba en proceso de restauración, pero el accidente del pasado 13 de octubre, pues,
no hubo otro remedio, pero ha quedado preciosa, han restaurado todos los vidrios de una manera muy artística, muy profesional y va a lucir esplendorosa. Está carroza, la regaló el ayuntamiento de Zaragoza y tradicionalmente la porta la policía local. Este año, el Rosario de Cristal va a salir un poquito antes a las 18.30 h. porque como es el último día de las fiestas, todo se arremolina, pero desde luego, quien se anime a verlo se va a llevar una sorpresa con esta gran carroza de la Hispanidad.
-Y no podemos despedirnos, José Antonio, sin preguntarte por las exitosas medidas de la Virgen del Pilar, con ese diseño del estampado del cachirulo que han causado un furor, quizás inesperado. De hecho, los dos días que salieron a la venta se agotaron en cuestión de horas.¿Está previsto que salgan más a la venta, van a quedarse fijas o que planes tenéis desde el Cabildo?
-En principio es una edición limitada. Se calcularon 15.000 medidas, pero se van a hacer más. Ahora ya dependemos de fábrica. Y probablemente estas medidas, aunque sigan siendo una edición limitada, se extiendan un poquito en el tiempo para que todas las personas que quieran adquirirla lo puedan hacer, especialmente los zaragozanos y aragoneses que somos los que vibramos con esos colores, y que nos hace recordar, como nos decía el arzobispo emérito don Vicente Jiménez, «que los pilares no nos impidan ver el Pilar». Esta fusión entre la tela estampada con los colores del cachirulo y la medida de la Virgen nos hacen caer una vez más en la cuenta de que sin Virgen del Pilar no hay fiestas y sin Virgen del Pilar, Zaragoza sería muy distinta.
-¿Qué consejo nos puedes dar para vivir estos días?
-El mensaje final para todos los católicos y los cristianos es que el día de la Virgen del Pilar es un día muy importante para participar en la Santa Misa, la eucaristía. Y muchas veces la ofrenda de flores que nos gusta tanto y que tanto se promueve, impide a personas que puedan participar en la Misa. Así que aseguremos primero la Misa. Y luego, a celebrar por todo lo alto a la que es Reina de la Hispanidad, siendo muy acogedores, que siempre lo somos. Vamos a coger a los que vienen , a nuestros hermanos, nuestros pueblos hermanos, de la hispanidad, de América, de Filipinas y de todos los sitios, porque al final todos hijos de María.