"Preparados para hacer un verdadero corredor educativo" Colegios de la familia franciscana rezan por la paz y ofrecen sus colegios para los niños ucranianos
"Todos los que formamos la Familia Franciscana nos unimos a las palabras del Papa Francisco, y nuestras oraciones se elevan al Señor"
"Nos preparamos y ponemos nuestros centros educativos y comunidades a disposición de los niños, niñas y jóvenes refugiados, para que encuentren espacios de paz y comunidades educativas que los cuiden y acompañen, en modo de acogida fraterna"
" La solidaridad es el único camino posible, la solidaridad es hoy más necesaria que nunca"
" La solidaridad es el único camino posible, la solidaridad es hoy más necesaria que nunca"
Queridas comunidades educativas franciscanas, en estos días nos sacude el más trágico de los acontecimientos: la guerra. Esta tragedia siempre surge al anteponer los intereses partidistas y de poder por encima del bien común. “La guerra es un fracaso de la humanidad”, como manifiesta nuestro Papa Francisco.
El pasado domingo 27 de febrero, el Papa Francisco nos pidió unirnos en la oración para que callen las armas.“Con el corazón roto por lo que está sucediendo en Ucrania, y no olvidemos las guerras en otras partes del mundo, como Yemen, Siria, Etiopía, repito: ¡Silencien las armas!”. Mientras pronunciaba estas palabras, padres, madres, hijos, jóvenes y abuelos se refugiaban en sótanos y estaciones del metro para rezar y celebrar la eucaristía. Hoy el Papa sigue expresando su profunda preocupación por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, haciendo un llamamiento apremiante a la paz.
Todos los que formamos la Familia Franciscana nos unimos a las palabras del Papa Francisco, y nuestras oraciones se elevan al Señor pidiendo especialmente por “los ancianos, los que buscan refugio en estas horas, las madres que huyen con sus hijos. Son nuestros hermanos y hermanas para quienes se deben abrir corredores humanitarios con carácter de urgencia y que deben ser acogidos”.
Sabemos que la oración y la acción deben ir unidas, por eso, nos preparamos y ponemos nuestros centros educativos y comunidades a disposición de los niños, niñas y jóvenes refugiados, para que encuentren espacios de paz y comunidades educativas que los cuiden y acompañen, en modo de acogida fraterna, y así no vean interrumpido, en la medida de lo posible, su proceso educativo.
En cualquier momento, podrían llegar alumnos y alumnas ucranianos y debemos estar preparados para hacer un verdadero corredor educativo. Queremos que nuestros centros, caracterizados por ser familiares y acogedores, estén abiertos de par en par en el caso de que llamen a nuestra puerta. La solidaridad es el único camino posible, la solidaridad es hoy más necesaria que nunca.
Hoy, 2 de marzo, Miércoles de Ceniza, el Papa Francisco nos llama a ayunar y rezar por la paz pidiendo a la Virgen María, la Reina de la Paz, que preserve al mundo de la locura de la guerra. Todos los centros educativos de la Familia Franciscana nos unimos en oración pidiendo por la paz en Ucrania y en todo el mundo.
Bienaventurados los que trabajan por la paz,
porque serán llamados hijos de Dios.
Etiquetas