El cristianismo es esencialmente liberación, de ahí que la reflexión del domingo revista un carácter profético-liberador. Y la teología de la liberación, a la que se le reconoce ya mayoría de edad, nos ha posibilitado una cierta libertad de espíritu y madurez para que nuestra misma liturgia y pastoral se vivan de una manera lúcida.

La religión es parte esencial de una cultura, según los mejores etnólogos y antropólogos. Hablamos, en el caso que nos ocupa, del continente amerindio profundamente religioso. En cambio, los antropólogos de los primeros años del siglo XX, venidos de Europa, llegaron a decir que en regiones de América Latina, de Brasil en concreto, los indígenas no tenían religión. Después reconocieron que en esos indígenas todo era religión.

¡La "religión popular" se está viviendo hoy en América Latina de un modo armónico, militante y liberador. Las celebraciones de la fe son cada vez más comprometidas socialmente, las celebraciones de las "romerías de la tierra", aquí en Brasil particularmente, las celebraciones nacionales o continentales de las CEBs, la eucaristía sobre todo se torna, sin dicotomías, celebración de la Pascua de Jesús y de la pascua de su pueblo, eucaristía fraterna y subversiva.

_¿Y la espiritualidad?

_La nueva santidad que propugnamos no es tan nueva, sino simplemente cristiana, la santidad de Jesús, la espiritualidad del cristiano que sigue a Jesús. Es decir, vivir la fe, en su respectivo lugar y tiempo, según el Espíritu de Jesús, ¿No es él el Verbo Encarnado?

Una espiritualidad cristiana no puede ser desencarnada, ahistórica. Y la historia es política. Necesariamente ha de ser una espiritualidad que supere toda dicotomía. Para nosotros el cielo no anda por un lado y la tierra por otro...Habrá de asumir los problemas, los sufrimientos y riesgos del respectivo pueblo, de la respectiva hora histórica que este pueblo está viviendo.

Contemplará a Dios no sólo en la palabra escrita, estática de la Biblia, sino ante todo en la conflictividad, en la lucha, en el proceso histórico. La Biblia sí, pero sobre todo la historia que vive el pueblo. San Agustín nos ha dicho que Dios ha escrito dos grandes libros: el libro de la Biblia y el libro de la vida. Es hoy famoso en las comunidades cristianas de América Latina este slogan: "la Biblia y la vida, la vida y la Biblia".

P. Casaldáliga, obispo
Al acecho del Reino, 25ss
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La espiritualidad liberadora es muy crítica con los abusos de los que ostentan el poder en los pueblos.
Este fue el caso Reagam, al que P. Casaldáliga dedicó este poema, que es una verdadera denuncia profética:

Presidente Reagam
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Te excomulgan conmigo los poetas, los niños, los pobres de la tierra:

¡Oyenos!

Hay que pensar humanamente el mundo.
No te hagas el Nerón.
No estás filmando, mico de pantalla:
¡eres el mandatario de una grande nación!
(Yo le diré a tu pueblo que limpie para siempre
la mierda que ha pegado a su bandera tu bota de cowboy.
¡Y le diré que sepa, cuando vota, que puede estar vendiendo mucha sangre y su honor!)

Habréis embriagado de Coca-Cola el mundo,
pero queda algún lúcido para deciros ¡no!
El lucro y el poder de vuestras armas
no pueden alcanzar mayor cotización
que el llanto enfebrecido
de un niño de color.

La raza de los Hombres ya no está para imperios.
Reagam, escucha: el sol
nace sol para todos
y llueve el mismo Dios
sobre todas las vidas que ha llamado a la fiesta.
Ningún pueblo es mayor.
Haz tu patio en tu casa,
¡respétanos!

Raquel te sabe, Herodes,
y habrás de responder por su desolación.

La estrella de Sandino te acecha en la montaña
y en el volcán despierta un solo corazón:
¡como un mar de coraje la Nicaragua niña
romperá tu agresión!

La sangre de los mártires sustenta nuestros brazos
y en nuestras bocas se hace cántico y surtidor.
Tú nunca has visto la montaña, Reagam,
ni has oído en sus pájaros la voz de los sin voz.
Tú no sabes de vida,
ni entiendes de canción.

No nos vengas ahora con morales hipócritas,
genocida que abortas todo un Pueblo y su Revolución.
La mentira que intentas darle al mundo (y al papa)
es la droga mayor.
Exhibes Libertad (en exclusiva)
y cercenas los pasos de la Liberación.

Los Estados Unidos son potentes y grandes"...
All right! We trust...in God".
Podéis creeros dueños, puedes creerlo todo,
incluso dios, tu dios
-el ídolo sangriento de tus dólares,
el maquinal Moloch-,
¡pero te falta el Dios de Jesucristo,
la Humanidad de Dios!

Yo juro por la sangre de Su Hijo,
que otro imperio mató,
y juro por la sangre de América Latina
-preñada de aurora hoy-
que tú
serás el último
grotesco
emperador!

P. Casaldáliga
Me llamarán subversivo