Vivimos del Evangelio y Deberíamos Vivir siempre POR El Evangelio. HOMENAJE A PERE CASALDALIGA
| ALFONSO JESÚS OLAZ
VIVIMOS DEL EVANGELIO Y DEBERIAMOS VIVIR SIEMPRE POR EL EVANGELIO.
HOMENAJE A PERE CASALDALIGA.
Esta es la gran catástrofe y paradoja del creyente del S.XXI
Vivir del Evangelio, de nuestra indiferencia hecha a la medida de lo que nos hemos prefabricado.
Un Evangelio de huesos
no de Carne viva y Caliente.
Teorizamos todos los días hasta el absurdo.
Hablamos del amor y no podemos soportar el querernos.
Decimos que amamos a Jesús al que no vemos y no podemos amar al hermano al que vemos. (1 Jn 4:20)
Cada día que nacemos nos volvemos a olvidar y por olvido perdemos luchando lo que no tenemos.
Imaginamos que somos los Señores de nuestro Señorío y somos los más bellos mendigos del universo.
Vivir el Evangelio es posible
Jesús ya lo hizo y nos dio su palabra y su carne para que su sueño lo pudiéramos realizar.
Siempre viviendo la vida de los otros, bebiendo de sus intereses, comiendo de sus indiferencias, durmiendo con los sueños de otros.
¡Es posible Vivir el Evangelio
sólo hay que tomar conciencia de ello, contestar que Sí y empezar a cumplirlo!
Entonces serás un Subversivo
¡todo lo que hagas te saldrá bien! ( Salmo 1. 3)
Subversivo como: Casaldáliga, San Oscar Romero, etc.
No vivirás de sueños, no serás un cautivo, no estarás en la clandestinidad.
¡Serás uno de los muchos Subversivos de Jesús!
En la Contemplación serás un Subversivo, encontrarás lo que no debes hacer y sabrás en su momento lo que deberás hacer.
En la acción como Subversivo te dejarás amar, conquistar, enterneceras a muchos y muchos no te entenderán.
¡Como un Subversivo no conquistarás nada, ni a nadie!
Ya quemaste las velas de tu vida.
Y abrazaste el madero ya perdido.
Y en la locura del amor presente
Encontrarás al hombre ausente
De piel blanca y morena
amarilla y celeste.
Nunca harás los amigos que tú quieras.
Irás por donde no quieres ir.
Confiarás en el espíritu insobornable, cautivador y fuerte como el huracán.
No esperarás a que te quieran
a que te alaben
a que te entiendan
a que se comprometan contigo
No esperes ninguna paga
ningún reconocimiento
lo normal es que tengas desiertos y noches Oscuras
y días maravillosos de luz y armonía y vuelta a empezar...
Jesús te ha hecho su cautivo
por la eternidad, hasta cuando tú quieras.
Cuando se le conoce,
cuando Él te muestra quien es y sus intereses, ya no vivirás para ti, esto muchos lo han hecho y muchos lo están haciendo, es posible, es cierto y soportable.
Sí, creo en Jesús
Yo también soy hijo de Jesús.
¿Cómo no creer en Él?
Que me ha bendecido al llamarme por ni nombre
¡Quiero creer en el Hombre, pues a pesar de todo.
Jesús cree en mi y en todo hombre!
¿Cómo no creer en el Evangelio?
Que es un pedacito de carne que se ha hecho en mí y en el hombre.
Una perla que está viva en toda la Humanidad, en la suya, en la Tuya, en la mía.
Un Sol y una Luna que me inspiran y me confortan en el bien, la paz y el descanso.
Un niño que respira y suspira
por el afecto y la ternura para lo que ha sido hecho y criado.
Y me rebelo cuando me dicen
que el futuro de la iglesia será de pequeñas comunidades como los primeros cristianos
Y me hace gracia que nos queramos comparar con los primeros cristianos: Esteban, Juan, Pablo, Pedro, etc
¡Tenemos la obligación de cumplir el sueño consciente y maduro de Jesús, entonces no tendremos pequeñas comunidades, sino que volveremos a creer en Jesús!
Si Vives el Evangelio, tu vida se te complicará toda, cómo a Jesús.
Si vives el sueño real, consciente de Jesús, sabrás discernir, responder a cualquier circunstancia por dura que pudiera ser, tienes su palabra, no la del hombre que no es suya y por eso no vale nada, sino la palabra de tu amigo y compañero Jesús, el hijo del Dios vivo.
Palabra que enamora porque es presencia y recrea porque no es ausencia.
HOMENAJE A PERE CASALDALIGA.
Esta es la gran catástrofe y paradoja del creyente del S.XXI
Vivir del Evangelio, de nuestra indiferencia hecha a la medida de lo que nos hemos prefabricado.
Un Evangelio de huesos
no de Carne viva y Caliente.
Teorizamos todos los días hasta el absurdo.
Hablamos del amor y no podemos soportar el querernos.
Decimos que amamos a Jesús al que no vemos y no podemos amar al hermano al que vemos. (1 Jn 4:20)
Cada día que nacemos nos volvemos a olvidar y por olvido perdemos luchando lo que no tenemos.
Imaginamos que somos los Señores de nuestro Señorío y somos los más bellos mendigos del universo.
Vivir el Evangelio es posible
Jesús ya lo hizo y nos dio su palabra y su carne para que su sueño lo pudiéramos realizar.
Siempre viviendo la vida de los otros, bebiendo de sus intereses, comiendo de sus indiferencias, durmiendo con los sueños de otros.
¡Es posible Vivir el Evangelio
sólo hay que tomar conciencia de ello, contestar que Sí y empezar a cumplirlo!
Entonces serás un Subversivo
¡todo lo que hagas te saldrá bien! ( Salmo 1. 3)
Subversivo como: Casaldáliga, San Oscar Romero, etc.
No vivirás de sueños, no serás un cautivo, no estarás en la clandestinidad.
¡Serás uno de los muchos Subversivos de Jesús!
En la Contemplación serás un Subversivo, encontrarás lo que no debes hacer y sabrás en su momento lo que deberás hacer.
En la acción como Subversivo te dejarás amar, conquistar, enterneceras a muchos y muchos no te entenderán.
¡Como un Subversivo no conquistarás nada, ni a nadie!
Ya quemaste las velas de tu vida.
Y abrazaste el madero ya perdido.
Y en la locura del amor presente
Encontrarás al hombre ausente
De piel blanca y morena
amarilla y celeste.
Nunca harás los amigos que tú quieras.
Irás por donde no quieres ir.
Confiarás en el espíritu insobornable, cautivador y fuerte como el huracán.
No esperarás a que te quieran
a que te alaben
a que te entiendan
a que se comprometan contigo
No esperes ninguna paga
ningún reconocimiento
lo normal es que tengas desiertos y noches Oscuras
y días maravillosos de luz y armonía y vuelta a empezar...
Jesús te ha hecho su cautivo
por la eternidad, hasta cuando tú quieras.
Cuando se le conoce,
cuando Él te muestra quien es y sus intereses, ya no vivirás para ti, esto muchos lo han hecho y muchos lo están haciendo, es posible, es cierto y soportable.
Sí, creo en Jesús
Yo también soy hijo de Jesús.
¿Cómo no creer en Él?
Que me ha bendecido al llamarme por ni nombre
¡Quiero creer en el Hombre, pues a pesar de todo.
Jesús cree en mi y en todo hombre!
¿Cómo no creer en el Evangelio?
Que es un pedacito de carne que se ha hecho en mí y en el hombre.
Una perla que está viva en toda la Humanidad, en la suya, en la Tuya, en la mía.
Un Sol y una Luna que me inspiran y me confortan en el bien, la paz y el descanso.
Un niño que respira y suspira
por el afecto y la ternura para lo que ha sido hecho y criado.
Y me rebelo cuando me dicen
que el futuro de la iglesia será de pequeñas comunidades como los primeros cristianos
Y me hace gracia que nos queramos comparar con los primeros cristianos: Esteban, Juan, Pablo, Pedro, etc
¡Tenemos la obligación de cumplir el sueño consciente y maduro de Jesús, entonces no tendremos pequeñas comunidades, sino que volveremos a creer en Jesús!
Si Vives el Evangelio, tu vida se te complicará toda, cómo a Jesús.
Si vives el sueño real, consciente de Jesús, sabrás discernir, responder a cualquier circunstancia por dura que pudiera ser, tienes su palabra, no la del hombre que no es suya y por eso no vale nada, sino la palabra de tu amigo y compañero Jesús, el hijo del Dios vivo.
Palabra que enamora porque es presencia y recrea porque no es ausencia.