Paula Vega es una joven de veintiocho años perteneciente a la Diócesis de Málaga donde sirve con su marido Dani y estudia teología en el Centro CSET San Pablo. Es misionera digital, con más de veintitrés mil seguidores en redes sociales, bajo el perfil de @llamameyumi. Fue enviada por Monseñor Lucio Ruiz en 2022, con la primera tarea de llevar el Sínodo Digital a las periferias de las redes sociales. Fue participante de la Asamblea Continental Europea sobre el Sínodo de Sinodalidad celebrada en Praga.

Trabaja como Community Manager de The Chosen, una serie estadounidense sobre Jesús que ya tiene más de 500 millones de reproducciones. También trabaja llevando las redes sociales de Redentoristas España y con Católicos en Red, una agencia de marketing católico. Paula ha dado numerosas charlas por España, pero también por Alemania y Estados Unidos, así como ha escrito en diversos medios como Pastoral Ecuménica, Revista Vida Nueva y Revista Ecclesia.

Recientemente, ha puesto en marcha el proyecto CosadeTres, un retiro para parejas prometidas, que les ayuda a preparar y profundizar en el sacramento y especialmente, en la ceremonia. Paula también ha sacado diferentes cursos de formación, como «Con M de Mujer» sobre mujeres bíblicas, y material de preparación para Adviento y Cuaresma.

Esto como presentación oficial pero la verdad es que conozco a Paula desde hace ya algunos años: fue antigua alumna del colegio san José (Fundación Loyola) y es estudiante en el Centro teológico S. Pablo de Málaga. Algo que siempre me ha llamado la atención de Paula Vega es su inconformismo, su frescura y su inquietud personal. ¿Qué cabía esperar de la hija de Merche (su madre), a la que también tuve el honor de conocer en el CSET san Pablo y con la que compartimos algunas sesiones interesantes de reflexión y diálogo? No podía salir sino una chica cristiana comprometida y muy actual...

_Paula, muchas gracias por acceder a esta entrevista. Sé que andas implicada en distintos frentes y es un gesto de generosidad por tu parte hacernos un hueco en tu agenda. La verdad es que tengo tantas preguntas que no sé por dónde comenzar, ya que temo dejarme cosas importantes en el tintero. Así que, he decidido preguntarte por cuestiones que tengan enjundia, aunque sean complejas de responder. Así pues, yendo al grano para no hacer esperar más a nuestros benditos lectores, si te parece, comenzamos:

Lo 1º que me llama mucho la atención es que no te consideres como tal una "influencers cristiana". Más bien te autocalificas como "misionera digital". ¿Qué diferencia hay entre una y otra, Paula?

Mi presencia en redes sociales no consiste en influenciar, en el sentido vago y vacío de la palabra, como quién intenta vender un bolso. Mi presencia y trabajo en redes sociales consiste en testimoniar, desde la experiencia y formación teológica, en que otros se encuentren con Cristo a través de mí. Yo soy un instrumento que intenta reflejar el amor de Dios. 

_Oye, Paula: ¿ qué les pasa a los jóvenes con la Iglesia? ¿O la pregunta es, quizá, qué le pasa a la Iglesia con los jóvenes?

Creo que el principal problema reside en que hemos dejado de dar respuestas convincentes a las preguntas más profundas. O que intentamos darlas, pero en un lenguaje que ya no se entiende. Las generaciones cambian y evolucionan, y hay que entender cuáles son las características de los «receptores» a los que queremos llegar. Y para eso, debemos tener en cuenta el código y el canal. Desterrar el «siempre se ha hecho así» y buscar formas con creatividad, siendo a veces un poco disruptivos. El mensaje del evangelio sigue siendo actual, pero debemos aprender a mostrarlo. 

_Hace poco yo escribía en este blog un artículo titulado "Si no estás en internet, no existes". ¿Es así? ¿En qué sentido? 

Depende de qué. Es cierto que si queremos llegar a los jóvenes, necesitamos estar en redes sociales porque es su manera de hablar y comunicarse hoy en día. Y digo estar, no utilizar, porque debemos ser una Iglesia de presencia, viendo el mundo digital como un lugar que habitar. Sin embargo, no podemos absolutizarlo. No todo tiene que estar en redes igual que no todo el mundo tiene que estar en las redes. Creo que es una cuestión de dones y carismas. Para estar, hay que hacerlo bien. No vale estar de cualquier forma.

Paula... Lo de “The Chosen” es una pasada. ¡Qué bueno! Cuéntanos, por favor, un poquito qué haces, tu experiencia en esta serie. 

The Chosen es una serie estadounidense que cuenta la vida de Jesús desde los ojos de aquellos que estuvieron con él. Ha llegado ya a más de 500 millones de visualizaciones en todo el mundo y se ha traducido en más de cuarenta idiomas. Además, se puede visualizar totalmente gratis descargando la app The Chosen. 

Soy la Community Manager de las redes sociales de The Chosen en España, que cuenta con casi 80 mil seguidores. Mi trabajo consiste en construir, ampliar y administrar la comunidad de fans, además de contextualizar la serie con la cultura española. Ha sido un regalo de Dios porque yo empecé a amar la serie antes de trabajar con ellos. Además, somos un equipo muy unido, formado por evangélicos y católicos, así que estoy viviendo un verdadero ecumenismo del amor. Hace poco pude estar en el rodaje en Estados Unidos y ha sido una de las mejores experiencias de mi vida.

_Al hilo de la sinodalidad: ¿Cómo sueñas a la Iglesia del futuro próximo? Creo que recientemente has tenido una experiencia preciosa recorriendo distintas ciudades de EEUU...

He seguido muy presente todo el tema de la sinodalidad desde que comenzó. Con mucha ilusión pero al mismo tiempo, con desesperanza. Daba conferencias por toda España animando a distintos grupos, movimientos y cofradías a entusiasmarse con la sinodalidad pero luego en mi día a día me encontraba situaciones que distaban mucho de lo que se estaba proponiendo. Como si fuera una utopía a la que nunca fuéramos a llegar. En Estados Unidos hemos podido conocer algunas diócesis y su manera sinodal -verdaderamente sinodal - de funcionar. Nos ha fascinado y especialmente ha supuesto una apertura de mente importante. ¡La sinodalidad es posible! Y sueño con una Iglesia que lo sea. Empezando por la Iglesia española.

_Pero para preciosa..., tu foto (bueno, vuestra foto de pareja) con el Papa Francisco. ¿Qué supuso esta visita a nivel personal y a nivel de fe? 

Ya desde el noviazgo empezamos a entender la vida de pareja como un amor que se multiplicaba hacia los demás. El matrimonio lo hemos entendido siempre como una vocación al servicio de la Iglesia. Por eso, lo primero que queríamos hacer como matrimonio era precisamente eso, poner nuestra vida al servicio del Reino. Y nos pareció una buena forma presentarnos ante Francisco. Yo le dije que estaba colaborando con el Dicasterio de Comunicación, me animó a seguir con las redes sociales y días más tarde nos hizo llegar unos rosarios bendecidos para nuestra casa. Fue un recuerdo que siempre guardaremos en nuestro corazón.

Muchas gracias Paula. Estoy seguro que coincidiremos en más de una ocasión...