Conversión a la fraternidad
“Jesús comenzó a predicar diciendo: convertíos porque está cerca el reino de Dios” (evangelio)
1. “Reino de Dios” es símbolo de la utopía que mantiene viva la esperanza en el pueblo donde se escribió la Biblia. Un tiempo paradisíaco en el que lobo feroz y cordero indefenso vivirán juntos y en paz; cuando los humanos en vez de forjar lanzas y espadas para matarse, invertirán los recursos en fabricar arados y podaderas para cultivar el campo. En nuestra cultura diríamos: se acabarán las violencias e imposiciones de unos pueblos sobre otros, y en vez de inventar armamentos cada vez más sofisticados para destruir, la técnica servirá para producir más recursos y distribuirlos con equidad entre todos. Es la utopía que que tantas veces soñamos.
2. La expresión “reino de Dios” significa fraternidad . Ese anhelo que respiró hace unos siglos el hombre ilustrado , y han seguido proclamando las revoluciones sociales de los dos últimos siglos. Una sociedad en que todas las personas se sientan miembros de la única familia, y donde seamos capaces de integrar el “yo” y el “tu” en el “nosotros”. Pero la torre de Babel es un símbolo para todas la generaciones y para todos los tiempos. Lo estamnos viendo en nuestros días Nos ilusionamos por construir una ciudad maravillosa entre todos; pero pronto surgen los egoísmos, unos quieren ser más que otros, ya no se entiende nadie, y la construcción se viene abajo.
3. La ideología en que funciona el sistema sociopolítico que prácticamente se ha impuetso en todo el mundo, es nefasta en su raíz, pues posterga las personas a la obsesión por tener más y doninar a los otros. Es urgente un canbio de estructras, pero sobre todo un cambio de corazón que inspire la conversión a la fraterrnidad. Es la invitación del evangelio: Dios es Padre, ternura infinita que a todos continuamente nos origina, nos ama y nos mira con amor; todos somos convocados por este amor para que libre y responsablemente vayamos construyendo la única familia humana.
1. “Reino de Dios” es símbolo de la utopía que mantiene viva la esperanza en el pueblo donde se escribió la Biblia. Un tiempo paradisíaco en el que lobo feroz y cordero indefenso vivirán juntos y en paz; cuando los humanos en vez de forjar lanzas y espadas para matarse, invertirán los recursos en fabricar arados y podaderas para cultivar el campo. En nuestra cultura diríamos: se acabarán las violencias e imposiciones de unos pueblos sobre otros, y en vez de inventar armamentos cada vez más sofisticados para destruir, la técnica servirá para producir más recursos y distribuirlos con equidad entre todos. Es la utopía que que tantas veces soñamos.
2. La expresión “reino de Dios” significa fraternidad . Ese anhelo que respiró hace unos siglos el hombre ilustrado , y han seguido proclamando las revoluciones sociales de los dos últimos siglos. Una sociedad en que todas las personas se sientan miembros de la única familia, y donde seamos capaces de integrar el “yo” y el “tu” en el “nosotros”. Pero la torre de Babel es un símbolo para todas la generaciones y para todos los tiempos. Lo estamnos viendo en nuestros días Nos ilusionamos por construir una ciudad maravillosa entre todos; pero pronto surgen los egoísmos, unos quieren ser más que otros, ya no se entiende nadie, y la construcción se viene abajo.
3. La ideología en que funciona el sistema sociopolítico que prácticamente se ha impuetso en todo el mundo, es nefasta en su raíz, pues posterga las personas a la obsesión por tener más y doninar a los otros. Es urgente un canbio de estructras, pero sobre todo un cambio de corazón que inspire la conversión a la fraterrnidad. Es la invitación del evangelio: Dios es Padre, ternura infinita que a todos continuamente nos origina, nos ama y nos mira con amor; todos somos convocados por este amor para que libre y responsablemente vayamos construyendo la única familia humana.