La PUERTA que ABRE CRISTO, que NO LA CIERRE la IGLESIA
DOMINGO IV DE PASCUA. BUEN PASTOR





01. YO SOY EL BUEN PASTOR – YO SOY LA PUERTA DEL APRISCO.
San Juan en el cp 10 de su evangelio nos presenta a JesuCristo como BUEN PASTOR y como PUERTA del aprisco.



Si en los evangelios sinópticos se habla de trigo, semilla, siembra, mies, etc., el evangelio de San Juan lo centra todo en Cristo: YO SOY EL PAN DE VIDA.
Esto es así porque en el evangelio de Juan hay una gran densidad cristológica.


En los evangelios sinópticos Jesús resucita (resucitación) a alguna persona. En San Juan se centra en el YO SOY LA RESURRECCIÓN Y LA VIDA.
Otros símbolos sirven también a San Juan para hablarnos de Cristo: YO SOY EL BUEN PASTOR, LA PUERTA, YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA, YO SOY LA VIDA, YO SOY LA LUZ DEL MUNDO, YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD, YO SOY EL AGUA, o simplemente: YO SOY (en su detención en el huerto de los olivos)

02. CON LA QUE ESTABABA CAYENDO...
Es lógico que San Juan se centre en Cristo con todo lo que estaba cayendo:
o los cristianos había sido culpabilizados de la destrucción de Jerusalén en el año 70 y, por lo mismo, los cristianos habían sido expulsados del ámbito judío que era su “lugar natural”.
o Por otra parte, las comunidades nacientes se estaban viendo impregnadas del “gnosticismo”, una religiosidad “espiritualoide”, que descartaba la humanidad de Jesús, funcionaban en plan de ritos mistéricos, etc.


SI comparásemos las cosas y los tiempos de la Iglesia de entonces y de ahora, veríamos que son exactamente al revés. A nuestro paisano JA Pagola le acusaron (al final falsamente) de que negaba la divinidad de Xto. En tiempos del evangelio de S Juan, hacia el año 100, el problema era exactamente al revés: se consideraban heterodoxos a quienes negaban la humanidad de Jesús. Por eso San Juan dirá que: El Verbo se hizo carne, (Jn 1,14)
En estas turbulencias de las comunidades cristianas de san Juan, tratan de volver a Cristo: permaneced en lo que os enseñé desde el comienzo, permaneced, permaneced en mi amor. Se trata de permanecer en Cristo.

03. EN LA IGLESIA LO DECISIVO ES CRISTO.
Es llamativo y chocante cómo en el evangelio de san Juan no hay términos comunitarios para hablar de la iglesia. Así como San Pablo, a la hora de denominar a la Iglesia, se expresa con términos “corporativos y comunitarios”: la iglesia es el pueblo, es cuerpo de Cristo, es Templo, la esposa, etc., en la tradición de San Juan todo se concentra en Cristo:




o En el evangelio y en las cartas de Juan no hay pueblo, pero conviene que uno, Jesús, muerta por el pueblo, (Jn 11,50).
o San Juan no emplea la expresión “Reino de Dios” , sin embargo hay rey. Ante Pilato Jesús manifiesta “YO SOY rey”. (Jn 18,37).
Las expresiones eclesiales de san Juan parten y se centran en Cristo. Se trata de permanecer unidos a Cristo:
o YO SOY LA VID, lo que hace falta es que recibamos la savia y la vida de la vida, de Cristo, (Jn 15,1-8)
o YO SOY EL BUEN PASTOR: se trata de seguir a Cristo.
Lo importante es vivir en o desde Cristo.

AVISO PARA NAVEGANTES DE BARCOS DE PEQUEÑO CABOTAJE ECLESIÁSTICO
En momentos de dificultades y tristezas eclesiásticas, volvamos nuestra mirada y corazón a Cristo, Buen Pastor. Volvamos a Cristo. En nuestras crisis personales y diocesanas, pongamos la mirada en Cristo, el que es. Los demás somos unos “juanlanas”.


En determinados momentos y lugares eclesiásticos, como en estos momentos en nuestra propia diócesis, nos hará bien seguir al buen Pastor, entrar por la PUERTA AL APRISCO de Cristo, permanecer unidos a la VID (Cristo), beber el AGUA de vida, comer del PAN de vida, poner nuestra esperanza en el que es la RESURRECCIÓN Y LA VIDA.

Sería motivo de otra meditación fijarse en las veces en que Jesús saca a sus ovejas, al ciego del Templo.

04. EL REBAÑO PUEDE RESULTAR GREGARIO, MASIVO.
ASALARIADOS, LADRONES Y BANDIDOS




Jesús dice, que hasta Él: todos los que vinieron antes de mí fueron ladrones y salteadores, (Jn 10,8), lo cual no significa que los pastores posteriores sean, seamos buenos pastores
El ejemplo del rebaño y del redil valen en lo que vale. Y sirven para indicarnos que estamos guiados por un Buen Pastor, no por asalariados del Obispado, o por personas que tratan de medrar en la vida diocesana, eclesiástica, política, económica, cultural, etc.
El buen Pastor nos conoce, nos ama a todos y cada uno, nos llama por nuestro nombre. Es bueno y hace bien que el Señor nos sondee y nos conozca, que dice un salmo (Sal 138.1), porque cuanto más nos conoce, más nos ama.




05. CRISTO ES LA PUERTA DEL APRISCO, ES EL PASO, LA PASCUA.
Es hermosa la imagen de la “puerta del aprisco-redil”, es el paso a la casa, vivir a cubierto, confiados. Cristo nos posibilita el paso a la Pascua a la vida.
La puerta no significa el control del peaje de la autopista, ni mucho menos “pasar por ventanilla” en el Banco. Todo sabemos que abrir la puerta significa acogida, abrir la casa, dar entrada, convivir.

06. EN ALGUNA MEDIDA, TODOS SOMOS PASTORES.
Los padres, los mayores de la familia, los profesores y maestros, los médicos y psicólogos, los periodistas y medios de comunicación, toda persona adulta, más o menos, somos pastores, guiamos a los demás.
Hace un mes decía el papa Francisco que los cristianos han de entrar en política porque es una forma de ejercer la caridad para el bien común. Los políticos son pastores de la comunidad, otra cuestión será si son asalariados, corruptos o buenos pastores, pero vivimos conforme nos guían los políticos y los medios de comunicación.
Quizás tenemos exceso de leyes y escasez de pensamiento y, de buenos pastores.

O7. GRATITUD HACIA LOS BUENOS PASTORES Y RESPONSABIBILIDAD
Por una parte pueden brotar en nosotros recuerdos y sentimientos de gratitud hacia los buenos pastores que han conducido nuestra vida: nuestros padres, hermanos, algunos profesores y algún profesor en concreto, algunos sacerdotes, algún médico que no solamente nos curó, sino que nos enseñó a vivir, algunos amigos, etc. Y en último término gratitud –gracia- a Cristo Buen Pastor.
(Mejor olvidarse de los asalariados y falsos pastores).
Por otra parte es una gran responsabilidad, una tarea noble, ser pastores, guías de los hijos, de los alumnos, de los feligreses, de la sociedad. Seamos gozosamente pastores, es un cuidado hermoso: transmitir, sembrar, caminar juntos, convivir.

Pablo VI decía aquello de que nuestra sociedad necesita hoy más de testigos (pastores), que de maestros profesores.




SOLAMENTE CRISTO ES NUESTRO BUEN PASTOR