"Iluminemos nuestros cielos oscuros con esa luz profética de la verdad y el amor" La verdad como llave maestra de un camino de libertad

La verdad como llave maestra
La verdad como llave maestra

"La verdad está inscrita en la vocación profética de todo bautizado. No podemos ser luz de un mundo sino nos adherimos a la verdad"

"La verdad hace caminar de frente en libertad, sin quedar atado a intereses que escondan lo verdaderamente justo"

"Esta liturgia dominical de Cristo Rey del Universo, nos invita, desde la verdad, a trascender la finitud de lo temporal"


Bien podríamos referirnos a la verdad como la llave maestra que nos abre al tránsito abierto de un camino en libertad.

La verdad está inscrita en la vocación profética de todo bautizado. No podemos ser luz de un mundo sino nos adherimos a la verdad.

¡Cristo es la verdad! De ahí la exigencia discipular de escucharlo. Su palabra penetra nuestra alma en lo más profundo, la libera de todo engaño, para quitar la tristeza que causa al alma la falsedad y la mentira y, volver a la experiencia de la verdadera alegría. Esta verdad purifica de lo engañoso para caminar en libertad con aire puro, en el caminar de la fe.

Cristo Rey

¿Cuánta tarea tenemos los seguidores de Jesús? ¿Cuánta limpia hay que hacer en nuestras vidas de manera personal y comunitaria?¡ Esas vigas que hacen pesadas nuestras vidas!

Este tiempo próximo inmediato del adviento, en la celebración ya de Cristo Rey del Universo. Las lecturas de este domingo nos abren a ver esta manifestación del Hijo del Hombre a este mundo que necesita ser iluminado de la luz de la verdad. Quien con su encarnación ha venido a abrirnos un camino en horizonte franco en la verdad, donde esta llave maestra, que es la verdad, nos abre una relación profunda con Jesús, con el Padre o ancianos de muchos siglos (como lo refiere el profeta Daniel en la primera lectura) y con los hombres ( a la manera como lo hace Jesús con Pilatos).

Jesús es el Rey soberano de todos los reyes de la tierra, porque ¿qué Rey o gobernante en la tierra no sucumben ante la verdad plena o la justicia? Toda autoridad temporal de gobernantes o reyes se ve debilitada en la administración de la justicia o la verdad, porque sucumben a intereses egoístas, sin priorizar de verdad la causa de los pobres o excluidos, como sí lo hace Jesús.

La verdad hace caminar de frente en libertad, sin quedar atado a intereses que escondan lo verdaderamente justo. Pilatos deja ir la gran oportunidad de abrirse a la verdad y quiere jugar a lo sagaz ante la verdad misma de Jesús.

Cristo Rey

La palabra de verdad en Jesús nos invita siempre a una toma de conciencia con la oportunidad de decidir cambiar, en la exigencia misma de la verdad, para hacer camino de salvación y trascendencia y, caminar al cielo; superando la finitud de lo temporal.

Esta liturgia dominical de Cristo Rey del Universo, nos invita, desde la verdad, a trascender la finitud de lo temporal. El ser humano es probado en sus decisiones a deleitarse en lo temporal y banal y, sufre en este vaivén que lo hace circular dinámicamente, buscando algo verdaderamente permanente.

Sólo en Jesús esta lo permanente, de transitar en el Él, de principio a fin, como alfa y omega. Él es el camino, por eso, se nos presenta así.

Como principio y fin, el hombre encontrará en Jesús ese descanso que busca su alma, pero una búsqueda que pasa por su inteligencia, entendimiento y voluntad. Todo en una acción libre de adherirse a Jesús o no adherirse. El hombre define su camino, si seguir a Jesús desde este mundo engañoso para trascender a la eternidad.

Al estar próximos a este tiempo de navidad, el cual nos atrapa en el mundo de lo comercial para dejarnos crudos espiritualmente en el próximo enero, cuando nos jala a comprar cosas y más cosas materiales, olvidándonos de lo que Jesús es: acariciar con verdad el amor en lo humano.

Cristo Rey

¡Invirtamos más en el amor y en la verdad y dejémonos atrapar por la belleza del corazón, de la sonrisa, de la mano que ese estrecha con quien necesita calor de amor y, dejemos que transite de verdad el espíritu de Jesús entre nosotros, que viene entre las nubes, de forma espectacular; para sorprendernos en lo que se prepara para acercarse a nosotros, desde ese amor y esa verdad que tanta falta le hace al mundo de hoy!

Cuando vamos a una fiesta patronal de iglesia, juegos olímpicos, celebraciones civiles, año nuevo, no faltan los cohetes o luces que iluminan con su belleza multicolor los cielos oscuros de la noche para hacernos contemplar el resplandor ante miradas que se sorprenden y se alegran significativamente, pero que les falta dejar en el corazón ese calor profundo que la verdad y el amor si dejan. Iluminemos nuestros cielos oscuros con esa luz profética de la verdad y el amor que nos deja Jesús como Rey del Universo.

Cristo Rey

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