Ernesto Cardenal 5. EN LA NOCHE ILUMINADA DE PALABRAS...
Con este tema 5 clausuramos, de momento, nuestro modesto homenaje a Ernesto Cardenal, con motivo del Premio de Poesía Iberoamericana Reina Sofía otorgado el pasado mes. Nos hemos centrado fundamentalmente en uno de sus primeros trabajos, “Gethsemani, KY”, ramillete de 29 poemas-oración, vivas postales de su retiro conventual en la abadía trapense de Gethsemaní, en el estado USA de Kentucky. De los 29 poemas editados, hemos seleccionado trece, tomados en su mayor parte de la web “a media voz” (pulsar).
Me gustaría facilitar algún breve comentario a cada uno de los tres títulos del post de hoy:
Fray Cipriano, Fray Anselmo, Fray Alberico... Nos sorprende el novicio poeta con una lista de nombres de compañeros conventuales, nombre religioso y nombre civil (hasta catorce hemos contabilizado). Y todo para expresar, con cierta tristeza, aunque aceptándolo, que reglamentariamente nadie debería curiosear quién es quién... Claro que sabe el novicio que, detrás del silencio, de cada traje blanco, de cada capucha, se oculta un ser humano que ama intensamente a Dios y es infitamente amado por Dios (“los amigos que yo quise...”).
En la noche iluminada de palabras... Muy característico de Cardenal y el “exteriorismo” de su pluma designar con letras mayúsculas ciertos nombre propios. Se ha retirado del seductor abrazo de una sociedad consumista, pero evoca en sus versos el parpadeo nocturno de la publicidad y sus interesadas mentiras. A esa misma hora rezan los trapenses sus libros oracionales, más verdaderos que la radio, la tele y los anuncios, y sostienen en las manos y el corazón encendidas lámparas que iluminan la noche con la ardiente zarza del divino amor (Mateo 25,1-13).
Detrás del monasterio, junto al camino... Extraño poema que cierra el círculo del Año Litúrgico como empezó, con un acto de reconciliación de toda la realidad, incluido el mundo mineral, vegetal y animal, salvados todos ellos, junto al hombre, por la victoria de Cristo. También los seres inanimados que un día sirvieron con fidelidad a la familia humana, están “esperando como nosotros la resurrección”. Es muy ejemplarizante descubrir cómo el poeta nicaragüense valora, en positivo y en cristiano, el generoso servicio de la hermana máquina y su infatigable familia de automóviles, tractores, trenes, aeronaves, lavadoras, televisiones...
LOS AMIGOS QUE YO QUISE Y QUE NO SÉ DÓNDE ESTÄN...
De VIDA EN EL AMOR: “En el cielo estaremos todos juntos y gozaremos de todas las compañías, de los que ahora conocemos y amamos confusamente, y de todos aquellos que no amamos porque no conocemos. Gozaremos entonces la intimidad de toda la humanidad, y con cuánta intensidad se amarán entonces los que ya se amaban aquí entre las contingencias del espacio y el tiempo y habían gozado ya de una intimidad... (p 102).”
FRAY CIPRIANO, FRAY ANSELMO, FRAY ALBERICO...
Fray Cipriano, fray Anselmo, fray Alberico,
fray Plácido: mis hermanos que no sé cómo sellaman
–escondidos en sus capuchas blancas y callados–
ni de dónde son. ¿Se llamarán Bill, Tom, Bob, Jack,
Jim? ¿Son de Detroit, de St. Louis, de New York?
¿En qué ciudades bebían con amigos en los bares,
entraban al cine con muchachas, y a drug-stores,
corrían en convertibles por avenidas iluminadas?
Sus hábitos blancos han vuelto otra vez a la ropería
o los llevan otros novicios. Otros se llaman ahora
fray Anselmo, fray Alberico, y fray Plácido.
Y Jim o Jack habrá vuelto a Detroit o a New York.
¡Mis compañeros blancos de tantas horas de coro
y tantas horas en el bosque cortando madera,
y en los claustros, encapuchados y callados:
los amigos que yo quise, y que no sé dónde están,
ni cuáles son sus nombres, ni quiénes son!
ESPERANDO AL ESPOSO EN LA NOCHE
DE LOS ESTADOS UNIDOS...
De VIDA EN EL AMOR: “Pero en los claustros se ve caminar a los hombres satisfechos y colmados, sonrientes, sin la arruga de la ansiedad en sus rostros... Y así también andan los animales. No andan nunca ansiosos, sino que todos ellos circulan tranquilos y colmados, como los monjes... No hay ninguna sed de infinito en ellos, y esta tierra es su cielo. Por eso los animales no se decepcionan de la vida nunca ni se suicidan, porque han sido creados para esta creación. (Y todos los animales también son santos, con su santidad animal: son castos, y pobres, y obedientes, como los monjes, y son humildes.) p 44.”
EN LA NOCHE ILUMINADA DE PALABRAS…
En la noche iluminada de palabras:PEPSI-COLA
PALMOLIVE CHRYSLER COLGATE CHESTERFIELD
que se apagan y se encienden y se apagan y seencienden,
las luces rojas verdes azules de los hoteles y de losbares
y de los cines, los trapenses se levantan al coro
y encienden sus lámparas fluorescentes
y abren sus grandes Salterios y sus Antifonarios
entre millones de radios y de televisiones.
¡Son las lámparas de las vírgenes prudentesesperando
al esposo en la noche de los Estados Unidos!
ESPERANDO COMO NOSOTROS LA RESURRECCIÓN...
De VIDA EN EL AMOR: “En nuestro cuerpo comulgan todos los animales vivos y los fósiles, los metales y todos los elementos del universo. El escultor que labra la piedra está hecho de la misma materia de la que está hecha la piedra, y es como la conciencia de la piedra, es la piedra hecha artista, es la materia con alma. Y cuando el hombre ama a Dios y se une con Él, es la creación entera con sus tres reinos, mineral, vegetal y animal, la que lo ama y se une con Él (p 114).”
DETRÁS DEL MONASTERIO, JUNTO AL CAMINO...
Detrás del monasterio, junto al camino,
existe un cementerio de cosas gastadas,
en donde yacen el hierro sarroso, pedazos
de loza, tubos quebrados, alambres retorcidos,
cajetillas de cigarrillos vacías, aserrín
y zinc, plástico envejecido, llantas rotas,
esperando como nosotros la resurrección.
ERNESTO CARDENAL
Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana
1.Oración por Marilyn Monroe
ORACIÓN POR MARILYN MONROE
2.Un novicio nos escribe de marmotas y estorninos...
LAS MARMOTAS EN SUS HOYOS NO ESTÁN MUERTAS...
HAY UN RUMOR DE TRACTORES EN LOS PRADOS...
HA LLEGADO AL CEMENTERIO TRAPENSE LA PRIMAVERA...
3.Vida en el amor
NO SÉ QUIÉN ES EL QUE ESTÁ EN LA NIEVE...
YO APAGUÉ LA LUZ PARA PODER VER LA NIEVE...
TÚ NOS ENVUELVES COMO LA NIEBLA...
FRENTE AL MONASTERIO, SOBRE LA CARRETERA...
4.De patos que emigran y grajos que juegan y gritan...
COMO LAS BANDADAS DE PATOS QUE PASAN GRITANDO...
LOS ÁRBOLES PARECEN CABELLERAS DE MUCHACHASPELIRROJAS...
LOS INSECTOS ACUÁTICOS DE LARGAS PATAS...
5.En la noche iluminada de palabras...
FRAY CIPRIANO, FRAY ANSELMO, FRAY ALBERICO...
EN LA NOCHE ILUMINADA DE PALABRAS...
DETRÁS DEL MONASTERIO, JUNTO AL CAMINO...