El periodista británico, biógrafo del Papa, abre un 'diario' desde el aula Pablo VI Cartas desde el Sínodo (I): "La Iglesia de la pirámide invertida que Francisco busca está en obras"

Austen Ivereigh escribe las 'cartas desde el Sínodo'
Austen Ivereigh escribe las 'cartas desde el Sínodo'

Como uno de los “expertos” – es un término ancho – no estoy en las mesas redondas sino en una mesa en en el borde del aula, junto con otros, con una vista amplia (es cierto lo que dice el Papa: “desde la periferia se ve mejor. Igual que hace un año, las mesas están arregladas como si esto fuera un banquete de bodas, o el “banquete de vinos añejos, de manjares con tuétano y vinos añejos colados” descrito en Isaías (25,6) con el que se inicia el Instrumentum Laboris

El Espíritu aquí tiene mucho de estudiantes reunidos en otoño para su último año académico después de la vacación larga. Los 368 miembros se conocen bien, hay risas y abrazos, y luego de tres días de preparación mental y espiritual (dos de retiro, uno de inauguración) se arrancó hoy el trabajo en serio. Como uno de los “expertos” – es un término ancho – no estoy en las mesas redondas sino en una mesa en en el borde del aula, junto con otros, con una vista amplia (es cierto lo que dice el Papa: “desde la periferia se ve mejor. Igual que hace un año, las mesas están arregladas como si esto fuera un banquete de bodas, o el “banquete de vinos añejos, de manjares con tuétano y vinos añejos colados” descrito en Isaías (25,6) con el que se inicia el Instrumentum Laboris.

Boletín gratuito de Religión Digital
QUIERO SUSCRIBIRME

Pero las semejanzas – más o menos la misma gente, misma metodología de la conversación en el Espíritu, la misma tech ultramoderna combinada con WiFi pésimo (no tuvieron un año para mejorarlo?) – hacen destacar las diferencias de este año.

Los miembros ahora se conocen, la metodología no les es ajena, y como los temas más neurálgicos y espinosos han sido entregados a los diez grupos de estudio, las mesas están más relajadas

Los miembros ahora se conocen, la metodología no les es ajena, y como los temas más neurálgicos y espinosos han sido entregados a los diez grupos de estudio, las mesas están más relajadas: los padres y madres sinodales se sienten menos obligados a batallar por sus puntos de vista. Lo que les permite enfocarse mejor en la tarea muy concreta de quitar el signo de interrogación tras la pregunta: ¿cómo ser una Iglesia sinodal en misión?

Aula del Sínodo

Para agilizar la tarea, hay cambios de metodología. Ya que fue tedioso el año pasado tener que escuchar los informes de cada una de las 36 mesas, esta vez se está pidiendo a las mesas de las diferentes lenguas a juntarse para sintetizar sus informes, de tal forma que habrá sólo cinco presentaciones, cada uno en el idioma de la asamblea: dos en inglés, uno de español y portugues juntos, uno en italiano, uno en francés. (inglés tiene dos porque es el idioma que más dominan los sinodales, a menudo como segundo idioma, reflejando la presencia cada más fuerte de las Iglesias africanas y asiáticas. O sea, si el italiano sigue siendo el idioma del Vaticano, ya no es de la Iglesia universal).

En la tercera de sus cuatro meditaciones potentes durante el retiro pre-asamblea, mi paisano Timothy Radcliffe OP dijo que el año pasado había llegado preocupado por la polarización liberal-conservadora en la Iglesia y cómo superarla. Pero durante la asamblea, “al escuchar parecía haber un desafío aún más fundamental: ¿Cómo puede la Iglesia abrazar todas las diversas culturas de nuestro mundo?… ¿Cómo podemos evitar que la red se rompa?”

Ya no estamos en una Iglesia occidental con misiones extranjeras, sino una Iglesia multipolar, lo que se que se vio muy claramente en la reacción furiosa africana a Fiducia Supplicans. Lo que escandaliza al Occidente (la exclusión real y/o experimentada de personas LGBT en y de la Iglesia) es muy diferente de lo que escandaliza los países donde lahomosexualidad no tiene reconocimiento social y cultural, ni hablar de legal

Ya no estamos en una Iglesia occidental con misiones extranjeras, sino una Iglesia multipolar, lo que se que se vio muy claramente en la reacción furiosa africana a Fiducia Supplicans. Lo que escandaliza al Occidente (la exclusión real y/o experimentada de personas LGBT en y de la Iglesia) es muy diferente de lo que escandaliza los países donde lahomosexualidad no tiene reconocimiento social y cultural, ni hablar de legal. La declaración Fiducia Supplicans “provocó angustia e ira entre muchos obispos de todo el mundo,” nos recordó Padre Timothy, que añadió: “Algunos miembros de este Sínodo se sintieron traicionados.” Nadie consultó, sobre todo, a los obispos africanos que – si recuerdo bien la declaración del Cardenal Ambongo, presidente del consejo episcopal SECAM – se quejaron de la poca sinodalidad.

Aula del Sínodo

La declaración del Vaticano de diciembre del año pasado a mí me pareció no una traición de la sinodalidad sino un fruto del sínodo, que había pedido a la Iglesia una mayor intregración de la verdad y de la misericordia. No aceptar las bendiciones de parejas del mismo sexo defendió la Verdad (el matrimonio es un institución heterosexual) a la vez que ofreció a todos la misericordia y la aceptación incondicional(todas las personas, aun las que están en relaciones del mismo sexo son en principio benedibles). Pero para gran parte de la Iglesia africana fue inaceptable, y el Papa consintió que no se aplicara.

Es esto el ejemplo de una Iglesia sinodal, multipolar, en la que se reverencia la diferencia cultural, “una red de agujeros vacíos enlazados por cuerdas”, como nos propuso el dominico inglés? Será interesante cómo se expresarán los africanos sobre Fiducia durante la asamblea. Mientras tanto, la asambloea escuchó una breve presentación el miércoles por el SECAM (el consejo de las conferencias episcopales africanas) sonre la poligamía, algo que, escandaliza a los occidentales. Pero es una cuestión pastoral muy significativa en muchos países de Africa. ¿Pedimos a un africano bautizado y casado con cuatro mujeres que elija a una y condene a las otras a la pobreza y la vergüenza social? A instancias del sínodo, el SECAM está llevando a cabo “un estudio en profundidad sobre cómo acompañar a las personas que viven en situaciones de poligamia”, y para sorpresa de muchos en la asamblea el enfoque “pone el énfasis en la cercanía, la escucha activa y el apoyo, ofreciendo un acompañamiento sin juzgar, al tiempo que defiende la Verdad del Evangelio.” ¿No es precisamente esto que buscó Fiducia Supplicans? Las perspectivas culturales son, como digo, muy fuertes.

Aula del Sínodo, ayer

Mientras tanto, la “cuestión mujer” sigue vigente, no obstante que el diaconado feminino en cuanto estado clerical hay sido descartado por ahora como posibilidad. El Instrumentum dedica mucho espacio al tema, sobre todo, pidiendo un “cambio de mentalidad: una conversión a una visión de relacionalidad, interdependencia y reciprocidad entre mujeres y hombres” (14). Si alguien necesitara un ejemplo de la necesidad de esta conversión, lo encontramos la noche del martes en la Vigilia Penitencial en la Basílica de San Pedro con el que se concluyó el retiro.

Mientras el Cardenal Farrell (prefecto del Dicasterio para Laicos, Familia y Vida) pidió perdón por “todas las veces que no hemos reconocido y defendido la dignidad de la mujer, cuando la hemos hecho muda y subyugada”, todas las mujeres de la asamblea – miembros y expertos, laicas y consagradas – estaban sentadas en las ultimas filas, detrás de nosotros los hombres (laicos, curas, religiosos) porque los oficales de la Basílica les pusieron ahí. La Iglesia de la pirámide invertida que Francisco busca está en obras.

Estamos aprendiendo. No es fácil. Pero estamos ya en camino

Pero qué bueno es ver, por lo menos, el andiamaje, y la energía y la buena voluntad de tantos. Hubo un momento ayer, después de escuchar los informes breves de los 10 grupos de estudio – tanto para discutir, tantos cambios para realizar, tantas tensiones para superar -- cuando pensé: ‘¡La Iglesia está viva!’ Tantas cuestiones que están siemdo estudiadas y consideradas al mismo tiempo, todas fruto de la escucha del pueblo de Dios, temas que necesitan ser aclarados  y profundizadas, y por último discernidas. Y ahora tenemos, por fin, una maquinaria de consulta y discernimiento eclesial que ha empezado a funcionar, y está avanzando.

Ya estamos en la fase de los hechos concretos. Lo que se ha creado en los últimos tres años está para quedarse: es un vehículo que construído desde los cimientos de la más antigua tradición, regenerada para nuestros tiempos, y es capaz de llevarnos al futuro. Estamos aprendiendo. No es fácil. Pero estamos ya en camino.

*El último libro de Austen Ivereigh es "Lo primero es pertenecer a Dios" Grupo Loyola

Volver arriba