Una soledad habitada
por la calidez de la amistad.
Un rastreador de estrellas
en medio de la noche.
Una caja de recuerdos
que fecundan el presente.
Un alfarero que moldea
la arcilla de las palabras.
Un paciente cazador
de las caricias de la vida.
Unas brasas que arden aún
bajo las cenizas del deseo.
Todo lo que soy cabe
en el exiguo y acogedor hueco de tu mano.