Manos Unidas lamenta el bombardeo que ha destrozado el hospital Los sueños destruidos del Hospital Al-Ahli Arab
"La población gazatí está al límite. Llevan doce días sin electricidad, agua, combustible, alimentos o medicinas y esto están llevando a los hospitales al borde del colapso. Estamos ante una catástrofe humanitaria provocada por el hombre y, desgraciadamente, el mundo no está haciendo nada para pararla"
Sami El-Yousef, director ejecutivo del Patriarcado Latino: "Estas personas pensaban que los hospitales serían lugares seguros, pero está claro que en Gaza nadie está a salvo"
| Manos Unidas
En Manos Unidas lamentamos profundamente el bombardeo que ha destrozado el hospital Al-Ahli Arab, el único centro sanitario cristiano de estas características que hay en Gaza. Un ataque que ha dejado más de 500 muertos y cientos de heridos, entre ellos niños, mujeres y ancianos, que habían buscado refugio en los edificios y patios del centro sanitario.
Sami El-Yousef, director ejecutivo del Patriarcado Latino, socio local de Manos Unidas en Jerusalén, destaca en un comunicado que no se han respetado las normas y tratados internacionales que protegen a los civiles y las personas que no participan en el conflicto. «Estas personas pensaban que los hospitales serían lugares seguros, pero está claro que en Gaza nadie está a salvo», lamenta.
La población gazatí está al límite. Llevan doce días sin electricidad, agua, combustible, alimentos o medicinas y esto están llevando a los hospitales al borde del colapso. Estamos ante una catástrofe humanitaria provocada por el hombre y, desgraciadamente, el mundo no está haciendo nada para pararla
El trabajo de Manos Unidas en Al-Ahli Arab
Desde 2012, Manos Unidas ha colaborado con el hospital Al-Ahli Arab, a través de la CNEWA, la Misión Pontificia de Jerusalén, con cuatro proyectos dirigidos a hacer frente a las carencias médicas derivadas de las escaladas de violencia de los últimos años, que han provocado escasez de suministros y enormes gastos en el consumo del carburante necesario para mantener en funcionamiento el centro hospitalario.
Durante años, los cortes diarios de luz y de energía que sufre la Franja de Gaza, afectaron al buen funcionamiento del hospital, que tenía que recurrir a otros sistemas para poder mantenerse activo. Por ello, en 2016, Manos Unidas volvió a colaborar con el hospital Al-Ahli Arab con un proyecto de la instalación de paneles fotovoltáicos y de un banco de baterías, que producen la energía eléctrica suficiente para la sala de emergencias y las consultas externas las 24 horas al día.
En 2019, Manos Unidas apoyó un programa enfocado a mejorar la salud infantil con la detección de los casos más graves de malnutrición de los niños de hasta 6 años y su posterior tratamiento en el hospital.
En Manos Unidas estamos abrumados y profundamente conmovidos por los acontecimientos que están sucediendo en Israel y Palestina, donde, desde 1992, realizamos proyectos de desarrollo para conseguir que se respeten los derechos humanos de los más vulnerables: educación, sanidad, necesidades básicas… Seguimos con mucho dolor lo que sucede en la zona, y expresamos nuestra profunda preocupación por la pérdida de vidas y la evolución de la crisis humanitaria en Gaza.
Etiquetas