#advientoenclavedemujer Para madres de hijas e hijos con TEA y para niñas autistas desde la teología feminista

Para madres de hijas e hijos con TEA y para niñas autistas desde la teología feminista
Para madres de hijas e hijos con TEA y para niñas autistas desde la teología feminista

Reflexión de Adviento para madres de hijas e hijos con TEA y para niñas autistas desde la teología feminista

1.⁠ ⁠Para las madres:
Madres, ustedes han recibido un don especial, aunque a veces ese don viene acompañado de retos únicos. Sus hijas e hijos con Trastorno del Espectro Autista (TEA) les enseñan diariamente a mirar el mundo desde una perspectiva diferente, a detenerse en los detalles, a reconfigurar los ritmos y prioridades de la vida. Desde la teología feminista, entendemos que Dios se revela en las diferencias, en la diversidad y en la singularidad de cada ser humano. Sus hijas e hijos son un recordatorio vivo de que cada persona lleva la imagen divina, incluso si esa imagen desafía las normas que nos ha impuesto la sociedad.

En la maternidad, especialmente con un hijo o hija con TEA, se manifiesta el cuidado, el compromiso y la paciencia como actos revolucionarios. Ustedes viven día a día el amor que no busca dominar, sino acompañar; no imponer, sino aprender. Desde esta perspectiva, su labor como madres es profundamente transformadora y es un signo de la presencia de Dios en el mundo.

Al igual que María, la madre de Jesús, ustedes también han sido llamadas a acompañar un camino que a veces puede parecer incomprendido por los demás. Pero como ella, están llamadas a confiar, a amar y a abrir espacios para que sus hijas e hijos sean plenamente quienes son.

2.⁠ ⁠Para las niñas autistas:

Queridas niñas, ustedes son una expresión única del amor y la creatividad de Dios. En un mundo que muchas veces espera que todas las personas encajen en moldes rígidos, ustedes son un recordatorio de que la diversidad no es un defecto, sino una riqueza. Cada uno de sus pensamientos, movimientos y formas de ver el mundo son un regalo que revela nuevas maneras de entender la vida y de relacionarnos con los demás.

Desde la teología feminista, afirmamos que el valor de cada persona no está en cuánto cumple con las expectativas de los demás, sino en su esencia, en lo que aporta al mundo desde su autenticidad. Dios las ha creado con un propósito, y aunque algunas veces puedan sentir que no encajan en ciertos espacios, su lugar en este mundo es profundamente necesario y significativo.

Ustedes son valientes al habitar un mundo que a veces no las entiende, pero recuerden que su existencia es sagrada. El amor de quienes las rodean, especialmente de sus madres y familias, es un reflejo del cuidado de Dios hacia ustedes.

3.⁠ ⁠Una invitación desde la teología feminista:

Desde esta perspectiva, debemos construir comunidades inclusivas donde todas las personas sean vistas y valoradas en su totalidad. La teología feminista nos llama a escuchar, a acompañar y a abrir espacios para el diálogo y la comprensión.

A las madres: ustedes son constructoras de ese Reino inclusivo, donde la ternura, la lucha y la esperanza se unen para transformar la vida de sus hijas e hijos y del mundo que los rodea.
A las niñas autistas: su presencia es una bendición, un desafío amoroso que nos invita a replantear nuestras certezas y a crecer como comunidad.

Que este Adviento sea un tiempo de reflexión y esperanza, recordándonos que el Dios que esperamos viene a habitar en todas nuestras diversidades, en todos nuestros caminos y en todos nuestros corazones.

Con ternura y esperanza,
Abuela Lucha de todas los y las niñas autistas

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