Clandestinas en el Vaticano: Seis mujeres se ordenan en una ceremonia a orillas del Tíber

No muy lejos de donde más de 300 padres y madres sinodales celebran en el Vaticano una de las sesiones de la segunda fase del Sínodo de la Sinodalidad, donde no se aborda el tema de la ordenación sacerdotal femenina ni tampoco, oficialmente, se debate sobre la ordenación de diaconisas, se celebra una ceremonia clandestina de ordenación de sacerdotisas y diaconisas

La ceremonia, celebrada en tres lenguas y en presencia de medio centenar de fieles de varios países, sigue la misma liturgia que una misa oficial, sin embargo, esta puede salirse muy cara a sus organizadores

La 'obispa' Bridget Mary Meehan, en una foto de archivo RRSS

No muy lejos de donde más de 300 padres y madres sinodales celebran en el Vaticano una de las sesiones de la segunda fase del Sínodo de la Sinodalidad, donde no se aborda el tema de la ordenación sacerdotal femenina ni tampoco, oficialmente, se debate sobre la ordenación de diaconisas, se celebra una ceremonia clandestina de ordenación de sacerdotisas y diaconisas.

Boletín gratuito de Religión Digital
QUIERO SUSCRIBIRME

La ceremonia, celebrada en tres lenguas y en presencia de medio centenar de fieles de varios países, sigue la misma liturgia que una misa oficial, sin embargo, esta puede salirse muy cara a sus organizadores, pues, con el Código de Derecho en la mano, las seis personas "ordenadas" -tres sacerdotisas y tres diaconisas, dos de ellas transgénero- tendrían que ser excomulgados, así como todos los demás que asisten a esa celebración, donde las mujeres, vestidas de blanco y rojo, prometen "servir al pueblo de Dios" frente a un altar decorado con velas y coronas de flores.

Para Bridget Mary Meehan, "obispa" estadounidense de la asociación que organiza el evento, esta sanción sería injustificada. "Trabajamos duro para crear una Iglesia más inclusiva y acogedora, donde las personas LGTB, los divorciados o los que se volvieron a casar, todos sean bienvenidos", señala.

Reivindicaciones de grupos feministas 

Las asociaciones feministas han intensificado en las últimas semanas sus iniciativas para reivindicar sus derechos y presionar ante la celebración de esta segunda fase sinodal, que se clausura la próxima semana en el Vaticano.

Estos grupos condenan la marginación de las mujeres por un sistema que consideran patriarcal. A diferencia de los anglicanos o los protestantes, la Iglesia católica sigue oponiéndose firmemente a la ordenación de mujeres.

Una primera sesión del Sínodo, en octubre de 2023, había puesto sobre la mesa la posibilidad de abrir a las mujeres el diaconado, orden anterior al sacerdocio que permite celebrar bautismos, matrimonios y funerales. Pero la idea fue descartada de los debates de esta nueva edición. El propio Francisco rechazó la idea con un tajante "no" en una entrevista en mayo con la cadena estadounidense CBS, para asombro de muchos.

"Fue como un jarro de agua fría", admite en París Adeline Fermanian, vicepresidenta del Comité de la Jupe (Comité de la Falda), una asociación francesa de unos 300 miembros que milita desde 2008 por una mayor paridad en la Iglesia católica.

Estas asociaciones critican una visión misógina y retrógrada y piden que se trate a las mujeres de la misma manera que a los hombres.

Etiquetas: sacerdocio femenino, La mujer en la Iglesia, feminismo, diaconado femenino