“Sí, considero a Bergoglio un antipapa. Su elección no tiene valor”. Se llama Fernando María Cornet, es argentino como el Papa, y también vive, como Bergoglio, en Italia. Desde la ciudad de Sassari, en Cerdeña, lleva años despotricando en público y privado contra Francisco, a quien acusa -al más puro estilo Viganò- de antipapa, al ser elegido después de una renuncia, la de Benedicto XVI, también inválida. Ahora, acaba de ser excomulgado por el Vaticano. 

En un comunicado emitido por la archidiócesis de Sassari, se anuncia que Cornet fue expulsado del sacerdocio y excomulgado tras haber sido condenado por ‘cisma’. El ya ex sacerdote, que en 2023 escribió ‘¿Habemus antipapam?’, donde lanzaba una serie de acusaciones contra Francisco y contra su pontificado, ha sido “dimitido del estado clerical” después de la sentencia dictada por el dicasterio para la Doctrina de la Fe, tras un proceso en el que Cornet participó.

En la nota, el arzobispo de Sassari, Gianfranco Saba, invita a los fieles a “rezar por la unidad de la Iglesia, teniendo presente que los cristianos, además del lazo de sangre y la pertenencia a la común familia humana ‘tienen a Dios como Padre y a la Iglesia como única madre’ y son parte del mismo cuerpo de Cristo del que son miembros”, y haciendo un llamamiento a al aunidad.

Cornet fue ordenado en 1992 en Argentina, y enviado a Italia en 1999. Tras una docena de años en Roma, el sacerdote se trasladó a Cerdeña. En declaraciones en su canal de Youtube, el ya ex sacerdote admitió que esperaba su condena, especialmente tras la publicación de su libro. “He sido perseguido por quien ocupó ilegítimamente un lugar que no le corresponde”, recalca Cornet, quien acusa al Papa de llevar a la Iglesia a la crisis “con decisiones ilegítimas, y designaciones de obispos, también ilegítimas”. Ahora, podrá seguir lanzando sus diatribas en redes… pero ya no desde el púlpito.