El purpurado francés reconoció que había abusado hacía 35 años de una menor El Vaticano anuncia que abrirá una investigación sobre el cardenal Ricard

El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, aseguró este viernes que la Santa Sede abrirá una investigación preliminar sobre el cardenal francés, Jean-Pierre Ricard, quien a principios de esta semana admitió -a través de un comunicado leído por el presidente de los obispos de Francia- haber abusado de una niña de 14 años hace 35 años. 

Bruni ha señalado que esta investigación se pondrá en marcha una vez que se encuentre a la persona más adecuada con la “autonomía, imparcialidad y experiencia necesarias” para llevar a cabo las pesquisas sobre el arzobispo emérito de Burdeos, de 78 años, y que sigue siendo miembro de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

"Tiempo de retiro y oración"

“Hace 35 años, cuando era párroco, me comporté de forma reprobable con una niña de 14 años. Mi comportamiento necesariamente causó consecuencias graves y duraderas para esta persona. Se lo expliqué y le pedí perdón, y renuevo mi petición de perdón aquí, así como a toda su familia. Es por estas acciones que he decidido tomar un tiempo de retiro y oración. Por último, pido perdón a aquellos a los que he hecho daño, y que vivirán esta noticia como una verdadera prueba", confesó el purpurado s.

Una confesión que, como señaló el presidente de la Conferencia Episcopal francesa (CEF), Éric de Moulins-Beaufort, “fue recibida por los obispos como una conmoción", por lo que "podemos imaginar el asombro de las diócesis y de todos los católicos de Francia”, señaló el también arzobispo de Reims, quien recordó el ministerio episcopal de monseñor Ricard en Grenoble, Montpellier y Burdeos, así como su labor a frente la CEF durante dos mandatos consecutivos, de 201 a 2007.

Según informa EFE, "a pesar de que Ricard admitió haber abusado de la joven, el Vaticano no tomó medida alguna contra el purpurado, ya que, según la praxis, un proceso canónico generalmente no se inicia hasta que las autoridades judiciales de un país, en este caso Francia, cierran el suyo y sólo tras concluir el juicio civil, la Iglesia puede solicitar a las autoridades judiciales la documentación para poder integrarla en su propia evaluación".