'Generar esperanza', lema de la Jornada Pro Orantibus de este domingo Los obispos muestran a los contemplativos como antídoto al "preocupante aumento de suicidios"

Este domingo, 4 de junio, se celebra la Jornda Pro Orantibus, dedicada a la vida contemplativa. Una realidad que, apuntan los obispos españoles en su mensaje, ofrece un "luminoso horizonte" para "generar esperanza", como reza el lema de este día, pese a los datos que muestran cómo España cuenta actualmente  -datos de 2022 de la Conferencia Episcopal- con 725 cenobios (66 masculinos y 689 femeninos), mientras que en 2017 se contabilizaban 801. La clausura se vacía pero, aún así, sigue generando esperanza de un modelo de vida distinto.

En su mensaje, el episcopado admite que "no es difícil encontrar motivos para la tristeza y la desazón" en la realidad cotidiana. "Amanecemos cada día con noticias de violencia, injusticia, egoísmo, exclusión, pobreza y sinsentido", resalta la nota, que también sugiere cómo, en el ámbito persona, "nos topamos con heridas y sinsabores que pueden ir sumiéndonos poco a poco en un desaliento paralizante".

Desmoralización y abatimiento

Una "percepción amarga" que ha contagiado a las nuevas generaciones, donde "se detectan altas dosis de desmoralización y abatimiento, e incluso un preocupante aumento de suicidios". Frente a estas realidades quieren ofrecer una llamado a la esperanza.

Y lo hacen parafraseando un mensaje del Papa Francisco a los jóvenes cubanos, en los que Bergoglio recalcaba cómo "la esperanza es audaz, sabe mirar más allá de la comodidad personal, de las pequeñas seguridades y compensaciones que estrechan el horizonte, para abrirse a grandes ideales que hacen la vida más bella y digna".

"La vida contemplativa alienta nuestra esperanza", destacan los obispos españoles, que piden "reconocer, celebrar y orar por aquellos hermanos y hermanas que, abrazando la vida contemplativa, alientan nuestra esperanza y la requieren".

Hombre y mujeres que "al renunciar al espíritu mundano y entregar radicalmente la vida 'a querer tocar lo grande […], la verdad, la bondad y la belleza, la justicia y el amor', se convierten en parábola de la esperanza última para la Iglesia y para toda la humanidad".

Compartir los consuelos y fatigas

"Cuantos caminamos tratando de dar respuesta a la sed de una vida lograda en medio de tantas desdichas agradecemos el testimonio de la vocación contemplativa, que se goza en buscar y esperar cada día al Señor que viene para que todos tengamos vida, y vida en abundancia; para que tengamos esperanza", resalta el mensaje, que pide "acercarnos a nuestros hermanos y hermanas contemplativos" para "compartir entre todos los consuelos y las fatigas de los hombres y mujeres de esta tierra". 

"Comprometámonos juntos en la misión de generar esperanza donde haga más falta, donde más urgente sea el anuncio del Señor resucitado. Y recemos también por ellos, para que puedan recibir el sostén de nuestra plegaria sincera ante Dios y se vean apoyados en su deseo de peregrinar sin desfallecer a la luz del rostro del Señor", finaliza el texto.

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