Vuelven las conversaciones teológicas en Montesclaros Hacia una Iglesia sinodal de iguales: Diversos ministerios, responsabilidades compartidas
Por quinto año consecutivo celebraremos en el mes de julio unas jornadas de reflexión teológica y experiencias pastorales en el Santuario de Montesclaros, situado en un bello paraje del Sur de Cantabria
Incidimos en el tema del Sínodo de la Sinodalidad. Nos parece un tema importante y decisivo para el devenir de la Iglesia, pues puede significar un momento de gracia, o, por el contrario, ser motivo de frustración
Reflexionaremos sobre el poder en la Iglesia, analizaremos el papel de los sistemas económicos y el peligro de que estos destruyan a las personas y al planeta y sobre la necesaria participación de la mujer en plano de igualdad
Es una tentación cómoda hacer un superficial lavado de cara… Pero no hay Iglesia Sinodal si no es entre iguales
Reflexionaremos sobre el poder en la Iglesia, analizaremos el papel de los sistemas económicos y el peligro de que estos destruyan a las personas y al planeta y sobre la necesaria participación de la mujer en plano de igualdad
Es una tentación cómoda hacer un superficial lavado de cara… Pero no hay Iglesia Sinodal si no es entre iguales
| Avelino Seco Muñoz
Por quinto año consecutivo celebraremos en el mes de julio unas jornadas de reflexión teológica y experiencias pastorales en el Santuario de Montesclaros, situado en un bello paraje del Sur de Cantabria.
Incidimos en el tema del Sínodo de la Sinodalidad. Nos parece un tema importante y decisivo para el devenir de la Iglesia, pues puede significar un momento de gracia, un recuperar lo más significativo de ser Pueblo de Dios, de recuperar la importancia del bautismo que nos hace sacerdotes, profetas y reyes; o, por el contrario, ser motivo de frustración para los que han confiado en este proceso, si no responde a las expectativas y se queda en un documento anodino.
"Es una tentación cómoda hacer un superficial lavado de cara… Pero no hay Iglesia Sinodal si no es entre iguales"
Es difícil cambiar hábitos arraigados y estructuras elevadas a la categoría de inmutables. Es una tentación cómoda hacer un superficial lavado de cara. La Iglesia ha pivotado sobre los clérigos y ha facilitado el descanso de unos laicos que han seguido de buena gana aquello de “Doctores tiene la Santa Madre Iglesia que lo sabrán responder”. Estos se quedan tranquilos en la actual estructura eclesial; pero hay otros muchos que, al descubrir la importancia de la autonomía personal y de grupo, terminan por irse. Es peligroso el dejarse llevar por el miedo a la libertad y escoger el dejarse guiar.
"Sin igualdad puede haber paternalismo, pero no habrá caminos recorridos como Pueblo de Dios en marcha"
No hay Iglesia Sinodal si no es entre iguales. Los ministerios son diversos, pero las responsabilidades deben ser compartidas. Estas son las ideas que vertebrarán las jornadas. Sin igualdad puede haber paternalismo, pero no habrá caminos recorridos como Pueblo de Dios en marcha.
Reflexionaremossobre el poder en la Iglesia, analizaremos el papel de los sistemas económicos y el peligro de que estos destruyan a las personas y al planeta y sobre la necesaria participación de la mujer en plano de igualdad, teniendo en cuenta que “Ya no se distinguen judío y griego, esclavo y libre, hombre y mujer, pues en Cristo Jesús todos sois uno”
Las experiencias de Comunidades Cristianas, que han sido pioneras en vivir la sinodalidad, nos ayudarán a descubrir los caminos que hay que recorrer.
