Este religioso brasileño llega a España para una experiencia misionera de dos años Douglas Silva, misionero del Verbo Divino: "La misión de los Hermanos es ser presencia"

"Soy Douglas Silva da Cruz, hijo de Vanda y Delci, hermano mayor de Vinícius, brasileño, nacido en Barra Mansa, ciudad de la provincia de Río de Janeiro y hermano misionero de la Congregación de los Misioneros del Verbo Divino. Ahora estoy en España para una experiencia misionera por 2 años". Así se presenta este religioso brasileño, uno de los 516 hermanos con votos temporales y perpetuos que tienen la congregación de los Misioneros del Verbo Divino esparcidos por todo el mundo. 

Hable sobre su camino vocacional

Nací y crecí en una familia muy católica y en una parroquia donde están los Misioneros del Verbo Divino hace casi 100 años. Aunque inicialmente no pensaba en ser religioso, me encantaba el espíritu misionero que había en nuestro modo de vivir la fe en comunidad y tenía el deseo de ser misionero. Por curiosidad, en el año 2015 pedí al párroco para conocer mejor la misión de la Congregación en un encuentro vocacional. Participé del encuentro y cuando me preguntaran si yo quería hacer una experiencia de un año en la Congregación mi respuesta fue un sincero y grande “NO”. Realmente yo no lo quería. Pero ese “no” me incomodó por un año, hasta que se cambió en un sencillo “sí”, para una experiencia de un año solamente. Era lo que yo pensaba.

¿Por qué después dijiste que “sí”?

¡Bueno! La experiencia me encantó. Y aunque estuviera lleno de dudas, lo que sería una experiencia se cambió en opción de vida. Dejé familia, amigos, universidad, trabajo… Y nuevamente, por curiosidad, empecé a conocer mejor la misión de los Hermanos de nuestra Congregación. Empecé a acompañar su trabajo y dedicación con las personas en las márgenes de la sociedad y me encanté. Mi corazón ardió en llama de fuego vivo. Encontré mi vocación mientras compartía la vida y la misión con el Hermano Olavo y el Hermano Domingos mientras ellos cuidaban de la gente que sólo tenía la calle para vivir y en las manos de tantos otros Hermanos que ayudaban a los migrantes, niños vulnerables, mujeres y hombres en situación de prostitución y a muchos otros.

A veces esos hermanos y sus gestos eran tan invisibles como la gente que ayudaban, pero la llama que incendian en los ojos de los invisibles era imposible de no ver. ¡Encontré mi vocación! Ser hermano como Jesucristo nos pide, “todos vosotros sois hermanos” (Mt 23,8), mientras soy Hermano religioso; pues la comunidad religiosa nos fortalece y ayuda a mantenernos firmes en la misión, siempre recordándonos que el centro de nuestra vida es Jesucristo.

El Hermano es y debe ser el reflejo de la fraternidad en la Vida Religiosa, pues su vocación y su misión principal es la Fraternidad

¿Qué es ser Hermano religioso?

Los Hermanos religiosos son lo que dan sabor y sentido, son sal y luz para la Vida Religiosa masculina, pues antes de todo la Vida Religiosa es compartir la vida y la fe en una comunidad fraterna, es compartir amor, esperanza, dolores, alegrías y sufrimientos mientras siembra  la alegría y el amor de Dios en medio de la gente. El Hermano es y debe ser el reflejo de la fraternidad en la Vida Religiosa, pues su vocación y su misión principal es la Fraternidad. Una congregación que nació con estos dos caminos vocacionales, sacerdotes y hermanos, pero hoy no tiene la presencia de Hermanos, es una congregación débil e incompleta.

La misión de los Hermanos religiosos es una vertiente que no está directamente ligada a la parte sacramental de la Iglesia, sino, de modo especial, en la promoción del aspecto fraternal y comunitario de la Iglesia de Jesucristo. El Hermano revela el rostro amigo y hermano de Jesús (Juan 15,15), a través de profesiones de la sociedad civil añadidas con conocimientos filosóficos y teológicos, junto con los laicos, mantienen la esperanza de un mundo mejor y una humanidad más fraterna.

En el caminar cercano y junto al pueblo el Hermano es capaz de sentir la acción de Dios en cada persona, haciendo también su propio camino de conversión personal

Con su ejemplo y testimonio en el modo de vivir, el Hermano invita a toda la gente a construir y a caminar un sendero de paz, amor y fraternidad a partir de la vida y de las actividades cotidianas. El llamado es desde la formación personal, intelectual, religiosa y profesional que cada persona ya tiene, sin grandes revoluciones, pero con pequeños cambios diarios, con pequeños gestos y ejemplos que imitan el amor y la amistad de Jesucristo por las personas. Yo los pienso y veo como “brisas” de fraternidad, porque es en la brisa suave, es en la sencillez que el Amor de Dios habita (1 Re 19,12).

Y en el caminar cercano y junto al pueblo el Hermano es capaz de sentir la acción de Dios en cada persona, haciendo también su propio camino de conversión personal. Solamente así el Hermano puede ayudar a que cada uno haga su propio camino cristiano, revelando la presencia de Cristo en la sociedad, en la política, en las escuelas, en las universidades, en las calles, en los hoteles, en los prostíbulos, en la familia, en la asamblea, en la comunidad.

El Hermano es invitado y también invita a ser rostro cercano, caminante y amoroso de Jesús donde es más necesario.

Y continuando…

En resumen, particularmente creo que la misión de los Hermanos es estar presente y ser presencia, no una presencia que sea llena de importancia o extremadamente útil en los moldes y significados actuales, sino una presencia “sin importancia” o “inútil”, pero llena de “sentido”. Vivimos en tiempos de carencia y perdidos en busca de sentido. Alguien que encuentra sentido en la sencilla manera de vivir, en la oportunidad de estar con las personas y en la construcción de fraternidad puede indicar caminos de búsqueda de ese sentido, como dice en la canción. El Hermano puede ser una luz en el mar de tanta gente a la deriva, despertando a las personas para que inicien su propio camino al encuentro del sentido de vivir, de ser feliz, el camino para el Reino de Dios.

¿Cuántos hermanos hay en la Congregación en 2024?

Hoy somos en todo el mundo 516 hermanos en votos temporales y perpetuos.

Brasil ha aportado grandes ejemplos de creyentes, ¿cuáles son importantes para ti?

Además del testimonio cristiano de mi familia, muchos amigos y compañeros de congregación, en el Brasil tengo muchos ejemplos a mirar, admirar e intentar seguir.

En mi formación viví el caminar de los obispos brasileños Dom Helder Câmara y Dom Paulo Evaristo Arns, ejemplos de hombres que evangelizaban con sus vidas, hicieron parte de mi formación, aunque no los haya conocido personalmente. Hay muchos videos y libros que posibilitan conocer sus vidas, pero es más bonito oír los recuerdos de la gente que vivió con ellos y hablan con emoción. Dom Helder era "la voz fuerte de la gente" que sabe que habla en nombre de muchos para la protección y cuidado de las personas; luchó contra diversos tipos de opresión, como la dictadura política, moral y del hambre. Dom Paulo caminaba en las periferias y ponía a esas personas periféricas en el centro, era cercano y se acercaba a las personas.

Otro ejemplo es Dom Pedro Casaldàliga, misionero español que trabajó en el centro de Brasil y luchaba por el derecho de la gente de tener su propia tierra y de vivir y trabajar con seguridad en ella. Defendía a los indígenas y actuaba contra la depredación ambiental. Cuidaba de los más débiles mientras denunciaba con coraje las situaciones de opresión y violencia apuntando a los malhechores y sus maldades.

Santa Dulce, Hermana brasileña conocida como “Dulce de los pobres”, ejemplo de bondad y solidaridad. Era frágil y pequeña en la estatura del cuerpo pero fuerte y grande en la fe y en la voluntad. Transformó un gallinero de un convento, donde cuidaba de los pobres enfermos, en un hospital que está a la vanguardia de tratamientos de algunas enfermedades. Era tan respetada  que su firma en un trozo de papel podía abrir las puertas a la ayuda, pues podía ser, por ejemplo, sustituido por un billete de viaje en autobús y llevar a un joven de vuelta a su familia en cualquier sitio de Brasil. Su amor por los necesitados y su fe la hacían superar todos los obstáculos para lograr ayudar.

Y como ejemplo más contemporáneo destaco el Padre Júlio Lancelotti, que dedica su vida a defender los derechos de la población que se encuentra en las calles de la gran ciudad de São Paulo, es ejemplo de resistencia ante la lucha contra políticas violentas que solo mata a los que ya están en las orillas de la ciudad.

¿Qué misiones tienen los hermanos de la Congregación en Brasil?

En Brasil trabajamos en la Animación Bíblica, en la Animación Misionera; en la Justicia, Paz e Integridad de la creación; y en la Comunicación. Estamos en universidades, escuelas, ONGs, canales de comunicación en la Internet, formación de laicos en las parroquias, pastorales sociales, apoyo a la población indígena.