Misa festiva
¡Feliz viernes! Ayer escuchábamos una misa bastante sencilla de un compositor español. Hoy vamos a cambiar de estética para escuchar otra misa algo más enjundiosa y de un compositor ruso que no es de los más conocido, lo que es una pena.
Hablo de Aleksandr Grechanínov (1864-1956), compositor ruso nacido en Moscú. Fue una figura algo marginal que empezó a ser reconocido cuado publicó sus sinfonías. En 1881 entró en el conservatorio de Moscú aunque su padre no lo aprobaba. Allí estudió piano y composición. Dejó Moscú para estudiar con Rimski-Kórsakov en San Petersburgo. Se empezó a ganar la vida tocando el piano y su mayor éxito vino con su primera sinfonía que estrenó su maestro Rimski. Volvió a Moscú y siguió con la interpretación al piano, a la vez que arreglaba varias melodías populares. En 1096 aceptó dar clases en el conservatorio de Moscú y nunca dejó de componer. También una de sus especialidades es la música religiosa, muy conocidas en la tradición rusa.
Escuchemos su Missa Festiva. Es una composición para coro mixto que data de 1937. Se dice que la compuso bajo la estela del famoso réquiem de Fauré. El maestro dejó Rusia en 1925 y terminó en Estados Unidos, recalando previamente en Francia. El coro no tiene acompañamiento en la partitura (aunque se podría usar) y Grechanínov se las apaña para hacer una mezcla sabia de melodías gregorianas con las armonías rusas, con lo cual la composición presenta un encanto muy especial y profundo.
La interpretación es de los Coros de la Filarmónica Narodowa y el de la Filarmónica de Varsovia.