Las diligencias están muy avanzadas y pronto será presentada denuncia ante el Juez La Guardia Civil investiga al ecónomo del Obispado de Alicante por cobro de comisiones
Está implicado también un empresario que ejercía de corredor inmobiliario, a las órdenes del sacerdote administrador
Las pesquisas se han llevado con mucho secretismo, para evitar la destrucción de pruebas
Está visto que no es necesario acudir al Vaticano para conocer de asuntos económicos extraños, que traspasan los linderos de la legalidad, también hay en las Diócesis asuntos polémicos como el que se ha destapado estos días en la Diócesis de Orihuela-Alicante, que comanda el obispo Jesús Murgui.
La Guardia Civil investiga al hasta hace unos días ecónomo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Francisco Martínez, y al empresario del sector de la recogida de ropa al que presentaba como su 'corredor' inmobiliario, José Luis Sánchez Requena, por presuntos desvíos de fondos en las operaciones de venta de patrimonio inmobiliario de la Iglesia, según publica hoy David Martínez en el digital “Valencia Plaza”.
El diario, cuenta que según han explicado fuentes próximas a la investigación, las pesquisas se iniciaron hace unos meses y están ya muy avanzadas, por lo que la Guardia Civil ultima la remisión de su denuncia al juez.La investigación a las actividades inmobiliarias del ecónomo se ha llevado con absoluto sigilo para evitar la destrucción de pruebas, según estas fuentes.
Según han explicado las mismas fuentes, el grupo de investigadores especializado en este tipo de delitos, dirigido desde la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante, ha hallado abundantes indicios de las presuntas irregularidades cometidas por el ex ecónomo (que abandonó su cargo el 11 de abril, tras destapar este diario un escándalo de cobro de presuntas comisiones) y su corredor. Al parecer, la investigación partió de una denuncia anónima que podría haber llegado desde dentro de la propia Iglesia.
Como se recordará, fue Alicante Plaza el periódico que destapó, a comienzos de año, el intento del 'corredor' del ecónomo de cobrar una comisión en 'dinero B' a un conocido promotor de la Vega Baja, para cerrar la venta del solar de la Fundación San José Obrero en Guardamar, que se había pactado previamente entre el ecónomo y el empresario por 2 millones. La promotora se negó a pagar dicha comisión, tras presionarles el 'corredor' con otro posible interesado que sí estaría dispuesto a abonar la 'mordida'. La operación saltó por los aires y Roma paralizó la venta de patrimonio de la Iglesia en Alicante ante las sospechas.
Cuenta el digital que dos meses después, el obispo de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, comunicó la decisión de no renovar un mandato más Martínez como responsable de la gestión económica de la Diócesis. Dicha renovación estaba decidida con anterioridad, pero finalmente el obispo, tras las presiones recibidas desde altas instancias, decidió apartar al ya ex ecónomo, aunque lo reemplazó por una persona de su confianza, el hasta entonces presidente de la Fundación San José Obrero (dueña del terreno cuya venta se rompió por la exigencia de una comisión).
Más o menos al mismo tiempo que Alicante Plaza publicaba las primeras informaciones sobre las operaciones inmobiliarias de Martínez y Sánchez Requena, la Guardia Civil recibía una denuncia anónima en la que se relataban otras maniobras similares que, según el denunciante, se habrían estado realizando de forma sistemática durante los veinte años en que el primero ha ejercido como ecónomo. Poco después, el todavía ecónomo protagonizaba otro escándalo, este de corte social, al negarse a ponerse la mascarilla en sus oficios (una actitud que se vincula al contagio de la mayoría de las monjas de clausura de Santa Faz).