Un acto por y para las víctimas. Organizado por ellas, con la colaboración de Repara, y que no busca triunfalismos ni hablar de pasado. De hecho, se denomina "No queremos pasar página". Así será el ' Acto de Reconocimiento y Reparación a las personas víctimas de abusos de la Iglesia' que este lunes, a las 19 horas, tendrá lugar en la explanada de la catedral de La Almudena, como adelantó en exclusiva RD el pasado mes de junio.

Un acto emotivo, que tendrá tres momentos: un primer espacio, de carácter aconfesional, en el pórtico de la catedral de la Almudena sita en la calle Bailén, cerca de la estatua de Juan Pablo II, con testimonios de supervivientes; un segundo, en el interior de la catedral, con las palabras de Cobo y un cántico de perdón llevado a cabo por los seminaristas de Madrid; finalmente, se plantará un olivo en la calle Bailén, a la salida de la explanada.

La línea gráfica del acto contará con imágenes cedidas por las propias víctimas. Desde la diócesis, fundamentalmente a través del equipo de Repara, se está apoyando en todo lo posible. El cardenal de Madrid, José Cobo, ha ordenado que se den todas las facilidades a las mismas, para que sean los supervivientes los protagonistas de un evento que quiere tenerles como eje.

Entre los testimonios que se leerán, se encuentra el de un sacerdote del que abusaron en el Seminario: "Si no dan importancia ni credibilidad a nuestro relato, ¿cómo vamos a dar el paso difícil de salir del anonimato, estando llenos de temores, miedos y vergüenzas? Si no hay denuncias, no es porque no haya habido abusos, es porque el tratamiento que vamos a recibir resulta más doloroso que el propio abuso", afirma.

Otro de ellos es el de una religiosa que sufrió abusos por parte de su director espiritual: "Era mi confesor. Cuando le dije que el beso que me dio me hizo sentir confusa, me dijo que no había pasado nada y que lo que ocurría es que mi mente estaba sucia y que, en realidad, era mi deseo el que me confundía. Estuve teniendo sexo con él diez años".

Al ser un acto pensado por y para las víctimas, éstas ocuparán los puestos principales tanto en la explanada como en el templo, aunque no se descarta la presencia de algunas autoridades estatales, autonómicas o municipales.