Semana santa 2023, Domingo de Ramos
¡Cómo es que nunca vemos a los Obispos de los países desarrollados, en manifestaciones reivindicando los Derechos Humanos de los pobres de los países empobrecidos y denunciando todos a una a los países desarrollados que los están oprimiendo!
| Faustino Vilabrille
La semana santa comienza con el Domingo de Ramos: una multitudinaria manifestación popular acompaña a Jesús por las calles de Jerusalén, a un Jesús que entra en un borrico: es el antagonismo total con los poderosos de este mundo, políticos y también religiosos, que siempre aparecen en grandes coches o incluso carrozas suntuarias y rodeados de aparatosos séquitos. como vemos con frecuencia en los países desarrollados
El Hermano Francisco dio un cambio radical a esa ostentación tan antievangélica, usando coches más populares, pero todavía falta mucho por hacer en esa línea, en muchos episcopados e incluso parroquias. Cardenales y Obispos aun siguen ocupando muchos palacios, lo que es muy contrario al Evangelio, pues Jesús de Nazaret nunca pisó ni mucho menos vivió en ningún palacio, a no ser el de Herodes al que fue conducido como un preso, a punto de ser condenado a muerte por las autoridades políticas de Jerusalén, apremiadas y requeridas al efecto por las autoridades religiosas de Jerusalén, que incluso movilizaron a los de su cuerda, a pedir la muerte de Jesús, porque querían deshacerse de El a toda costa, duramente cuestionadas por Jesús porque “imponían grandes cargas al pueblo y ni un dedo ponían para ayudarles a soportarlas… que buscaban los primeros puestos en los banquetes y que la gente los llamase maestros. Vosotros, no os hagáis llamar maestros, porque una solo es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos” , les decía Jesús a sus discípulos (Mateo 23,4-7). ¡Qué lejos estamos del Evangelio! Todas las religiones, fueron históricamente grandes fuentes y causas de conflictos sociales y personales, y tal como las conocemos hoy ya no tienen futuro, porque no están dando respuesta a las realidades y necesidades del mundo actual, y en concreto la católica, que está en evidente declive, para dar paso al Evangelio, que sí tiene pleno futuro porque no es una religión, sino un mensaje de Vida, de Amor, de Fraternidad, de Justicia, de Solidaridad, de Paz, de Igualdad, para el Bien de la Humanidad y la Creación, que es lo que realmente está necesitando el mundo actual, y por eso mismo decimos que el Evangelio tiene pleno futuro, y por lo cual Jesús dio su vida, y la debemos dar también nosotros, pues El mismo dice: “Yo he venido para que todos tengan vida y vida en abundancia” (Juan 10,10).
¡Cuándo veremos a los Obispos de los países desarrollados, en manifestaciones reivindicando los Derechos Humanos de los pobres de los países empobrecidos y denunciando todos a una a los países desarrollados que los están oprimiendo!
Feliz domingo a tod@s.-Faustino