Lo que Estados Unidos esta haciendo contra Venezuela, con sus sanciones,  y contra Cuba, con el bloqueo económico, entre otros, corresponde a lo que las mafias criminales hacen en los distintos países donde actúan.  En ningún momento se dirigieron al Consejo de Seguridad de las Naciones unidas para saber si sus acciones en contra de esos dos países, entre otros, respetaban la Carta magna de las N.U.. Al contrario, las N.U. pidieron en varias ocasiones el cese de las sanciones contra Venezuela y del bloqueo económico contra Cuba.

El engaño, la mentira, la corrupción, todo es bueno para justificar sus acciones criminales. Lo de las Naciones Unidas, del Consejo de seguridad y de la Carta magna de la Institución internacional no le importa en nada. Tiene suficiente dinero para comprar distintos colaboradores en distintos países así que instituciones de credibilidad moral, como lo es el Vaticano y los distintos episcopados de a través del mundo. Yo menciono eso de la Iglesia porque se sabe, ahora, que el papa Juan Pablo II y el papa Francisco firmaron, cada uno en su tiempo, un pacto de cooperación con el imperio estadunidense.

https://www.religiondigital.org/humanismo_de_jesus/Pactos-secretos-Vaticano-Unidos_7_2079162075.html

https://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-262407-2014-12-21.html

Con esos compromisos, el Vaticano, el Papa y los episcopados, pierden toda credibilidad como observadores internacionales objetivos. No ven las sanciones impuestos por E.U. a Venezuela, tampoco el bloqueo económico contra el Pueblo de Cuba.

Al ligarse con el imperio estadunidense, la Iglesia se hace cómplice de sus acciones criminales en contra de esos pueblos. Los hechos hablan por si mismo y en ellos se encuentra la verdad.

Importa con urgencia que la Iglesia recupere su catolicidad al no tener otro pacto que el del Evangelio y de Jesús.

Una Iglesia en salida se mantiene al servicio de un solo maestro que es el Resucitado en la persona de Jesús. El mismo que respondió NO a Satán que le pedía someterse a su voluntad. Parece que J.P.II y el papa Francisco tuvieron motivos para responder “SI”. Me pregunto si Jesús hubiera respondido “Si”.

Si el papa Francisco y los episcopados quieren hablar de Venezuela y de Cuba, que no se olviden denunciar con fuerza las acciones criminales de su aliado con sus sanciones, sus mentiras, su corrupción, sin olvidar el bloqueo, uno de los mas  que criminales de mas de seis décadas.

Yo soy de la Iglesia y no comparto nada, en lo político, de lo que dice y hace la Iglesia contra pueblos que quieren sus independencia y soberanía. No hay que mirar las ideologías, sino los hechos y lo que hacen para que sus pueblos tengan mejores condiciones de vida y gran solidaridad entre ellos.

Volvemos al juicio final y miramos quienes andan mas por ese camino. A ver son los del capitalismo salvaje o los del socialismo humanista.

Materia para reflexión de todos y todas.

Oscar Fortín

17 julio 2021