El Obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez, habría estado en una lista negra de posibles personas a eliminar por parte del régimen orteguista, tras el estallido de las protestas anti-gubernamentales en abril de 2018, según reveló en una entrevista la exembajadora de EE.UU. en Nicaragua, Laura F. Dogu.

En declaraciones al rotativo local The Indiana Gazzete, Dogu –quién dejó el cargo de embajadora de EE.UU. en el país centroamericano en octubre de 2018-, aseguró que tras el estallido de la crisis socio-política en Nicaragua, el 18 de abril de 2018, tanto ella como otras personalidades de la vida nacional, como Monseñor Báez, estuvieron en la mira del régimen para ser eliminados.

“Antes de que dejara su cargo como embajadora, había sido objeto de un plan de asesinato contra otros, incluido el obispo Silvio José Báez, que era o se pensaba que era parte del movimiento antigubernamental”, señaló Dogu, quien señaló que cuando llegó al país en 2015 todo estaba en calma mientras que a su partida; contempló el inicio de estallido social debido al descontento popular con el autoritarismo represivo del régimen de Daniel Ortega.

Para Dogu, quién ahora labora en una universidad estadounidense, el mes de abril de 2018 representa el levantamiento popular contra el autoritarismo del régimen orteguista y alabó el papel que jugaron los jóvenes universitarios nicaragüenses que vanguardizaron las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega.

"Para aquellos de ustedes que hablan español y quieren ver un momento en la historia, hay un video de la apertura del evento de diálogo nacional (…) Te animo a que lo mires. Tuve la oportunidad de sentarme en esa sala en vivo. El poder de la juventud, y muchos de ustedes caen en esa categoría, no pueden ser subestimados”, subrayó la ex diplomática; quién participó ese día del inicio del Diálogo Nacional en que los Obispos de Nicaragua fungían como mediadores y testigos.

En esa ocasión el joven universitario Lesther Alemán, quién estudiaba comunicación en la jesuita Universidad Centroamericana (UCA) de Managua; interpeló a Daniel Ortega y manifestó que la mesa del Diálogo Nacional era para organizar su salida del país. El acto, transmitido en directo a todo el país por la cadena televisiva de la Iglesia; le dio la vuelta al mundo.

"Este joven, Lesther Alemán, se puso de pie y se enfrentó al presidente, lo llamó asesino, le dijo que no estaban allí para negociar, y que estaban allí para organizar su partida. Todavía me da la piel de gallina pensar en eso. Fue extraordinario. El lunes, cuando todo esto comenzó, él era un estudiante. El miércoles y el jueves vio a sus amigos ser asesinados a tiros a su lado. Y el viernes era un líder estudiantil en un equipo de alianzas civiles que intentaba devolver la paz a Nicaragua”, puntualizó Dogu.

Permanente asedio contra el obispo 

El obispo auxiliar de Managua, el carmelita descalzo Silvio José Báez, ha estado desde el inicio de la crisis socio-política nicaragüense bajo una sostenida campaña de difamación en redes sociales que escaló a su nivel más alto en julio de 2018, cuando los jerarcas de la Iglesia católica de Nicaragua fueron agredidos por simpatizantes del régimen y paramilitares al servicio del Ejecutivo nicaragüense en la basílica de Diriamba, ubicada a unos 40 kilómetros al sur de Managua.

Días después, el presidente Daniel Ortega en una plaza pública de Managua acusó a los obispos de ser “golpistas” y a finales de octubre, monseñor Silvio José Báez fue víctima de una campaña de desprestigio en los medios de comunicación propiedad del régimen dónde compartían un audio falso del obispo comentando diversas situaciones ocurridas en el país.

A raíz de esto, un grupúsculo de orteguistas impulsó la recolección de firmas para “exigir” al Vaticano que retirara al obispo Silvio Báez del país o lo “entregara a la justicia” para ser juzgado por supuesto “terrorismo”. Las acusaciones fueron rechazadas por el arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo Brenes, quién aseguró que los presuntos “denunciantes” eran en realidad un “pequeñito grupo de personas”.

Buscan enjuiciarlo

Más recientemente, este pasado 1 de abril, el propagandista oficialista Moisés Absalón Pastora, acusó sin pruebas al obispo auxiliar de Managua Silvio José Báez; de estar detrás de los hechos de violencia ocurridos el sábado 30 de marzo en el centro comercial Metrocentro; cuando el paramilitar orteguista Germán Félix Dávila Blanco abrió fuego a mansalva contra manifestantes opositores congregados en dicho centro de compras.

Absalón Pastora, en un tono irrespetuoso y soez, arremetió contra el líder religioso, llamándolo “cabo Báez” y aseverando que su mayor deseo es ver al obispo auxiliar de Managua dentro de la cárcel y “vestido de azul”, tal y como se viste a los presos políticos dentro del centro penitenciario Jorge Navarro.

“Yo contra quién la tengo, y ahora más después de haber leído su reciente tuiteo (sic), es contra el cabo Báez; que esconde tras esa delicada y educada voz, un verbo explosivo de odio, y realmente tóxico y piroplástico”

, manifestó visiblemente ofuscado el propagandista en su programa matutino que trasmite la televisora estatal Canal 6.

Según Pastora, va a sugerirle un “planteamiento serio” a la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y al mismísimo Papa Francisco sobre la predicación pastoral de Monseñor Silvio Báez; a su vez que también atacó a los obispos Rolando Álvarez (Matagalpa) y Juan Abelardo Mata (jerarca de Estelí y portavoz del Episcopado nicaragüense).

“El cabo Báez no debería estar en una iglesia, bajo una sotana, ¡Sino en una cárcel y vestido de azul y junto con él, Mata y Álvarez!”, expresó en tono amenazante el propagandista del orteguismo; quién también ocupa el cargo de concejal en la Alcaldía de Managua (ALMA) bajo la égida del partido de gobierno.

"Perverso intelectual"

Pastora siguió despotricando durante varios minutos contra el obispo Báez, llamándolo “perverso intelectual” y al que siguió acusando sin presentar prueba alguna de organizar una “orgía de sangre” e incluso llegó a decir que el resto de miembros del Episcopado eran “tontos útiles como él”.

El propagandista vociferó que monseñor Báez debe “cerrar el pico” ante la actual coyuntura nacional; en lo que podría ser una nueva campaña de desprestigio contra los obispos de la Iglesia Católica de Nicaragua; quiénes han denunciado la represión gubernamental contra los manifestantes pacíficos que se reúnen cada sábado en el centro comercial Metrocentro para protestar contra el régimen.

Absalón Pastora siempre ha vendido su imagen como la de un católico devoto ultraconservador que emprende campaña contra el aborto, la eutanasia y el matrimonio entre personas del mismo sexo; pero desde abril de 2018 ha mantenido una postura de ataque contra los obispos de Nicaragua, a los que ha llegado a tildar de “demonios”, “iluminatis” y hasta “pandilleros”.

Cabe señalar que si bien, hoy el propagandista orteguista ataca virulentamente al obispo auxiliar de Managua; en diciembre de 2012 invitaba al jerarca católico a su hogar con bombos y platillos para que le bendijera el nacimiento que suele poner en la sala de su casa de habitación cada diciembre.

“Gracias mi estimado y apreciado Monseñor Silvio Silvio José Báez por ésta deferencia compartida con mi párroco Gerardo Rodríguez y en compañía de mi esposa Saraí Medrano Tenorio y mis buenos amigos Ernesto José Bendaña Bonilla y Rene Medina Sánchez y por las familias que inmediatamente de su partida nos comenzaron a visitar tras su bendición”

, escribió en Facebook en esa ocasión el hoy apologista del orteguismo.