Con una hambruna a las puertas, la guerra se ha cobrado 32.000 vidas, 12.000 de ellas, niños Youssef Asaad, desde la parroquia de Gaza: “Estamos rodeados por el olor a muerte, está en todas partes”
"La situación sigue siendo muy grave y empeora cada hora. Nuestros cristianos tienen fe y esperanza en lo esencial, en Jesucristo. Llevan meses viviendo un calvario sin tregua. Como el resto de la población de la Franja, sienten sobre sus hombros una gran ilusión y una gran decepción: no poder ver un horizonte de paz, el fin de la violencia y la muerte. Este conflicto ya se ha cobrado más de 32.000 vidas, 12.000 de ellas niños. Las estimaciones hablan de que, al menos, 8.000 personas siguen bajo los escombros". Habla el padre Gabriel Romanelli, párroco de la Sagrada Familia, la única parroquia católica en Gaza
"Para Paolo Pezzati, portavoz de crisis humanitarias de Oxfam Italia, "nunca antes habíamos asistido a una situación tan grave en un corto espacio de tiempo. En apenas unos días, la población del norte de Gaza se encontrará ante una auténtica hambruna, situación que muy pronto se producirá también en el sur sin un alto el fuego y una respuesta humanitaria adecuada. Muchos niños ya están muriendo de hambre mientras la comunidad internacional permanece inactiva"
| Daniele Rocchi
(agenciasir).- "La situación sigue siendo muy grave y empeora cada hora. Nuestros cristianos tienen fe y esperanza en lo esencial, en Jesucristo. Llevan meses viviendo un calvario sin tregua. Como el resto de la población de la Franja, sienten sobre sus hombros una gran ilusión y una gran decepción: no poder ver un horizonte de paz, el fin de la violencia y la muerte. Este conflicto ya se ha cobrado más de 32.000 vidas, 12.000 de ellas niños. Las estimaciones hablan de que, al menos, 8.000 personas siguen bajo los escombros". Habla el padre Gabriel Romanelli, párroco de la Sagrada Familia, la única parroquia católica en Gaza.
Desde Jerusalén, donde se vio bloqueado por la guerra que estalló el 7 de octubre, el P. Romanelli sigue constantemente y por todos los medios a sus feligreses, refugiados desde hace meses en el recinto parroquial junto con otros cristianos desplazados, unos 600 en total, que lo perdieron todo en los bombardeos.
“El otro día –cuenta a Sir el párroco misionero de origen argentino del Instituto del Verbo Encarnado–, mi vicario, el padre Youssef Asaad, que se encuentra dentro de Gaza, me dijo: 'Abuna (padre), no se imaginan el dolor que estamos sintiendo y la desesperación de la gente. Estamos rodeados por el olor a muerte, lo sentimos, con fuerza, en todas partes. Estamos enterrados bajo montañas de escombros, basura, las alcantarillas han explotado. La lluvia sigue cayendo y, si por un lado esto es una bendición, por otro empeora las condiciones ambientales e higiénicas, porque provoca una gran humedad, que combinada con el calor del sol, eleva el olor a cuerpos en descomposición que se encuentran en el suelo, por todas partes y bajo los escombros'”.
“A pesar de todo –añade el P. Romanelli–, cada día rezan por la paz y ofrecen su sufrimiento y sus privaciones por el alto el fuego y por la liberación de los rehenes”. Algo parece moverse en el frente diplomático con la reanudación de las conversaciones entre Estados Unidos e Israel para discutir una posible tregua. Se espera que una delegación israelí, según informó el asesor de seguridad nacional estadounidense, Jake Sullivan, llegue a Washington para discutir también un "enfoque alternativo" a la operación de Rafah.
La vida dentro de la parroquia
Se reabrió la cocina. La vida dentro de la parroquia transcurre lentamente, es difícil salir porque "es muy peligroso", recuerda el padre Romanelli. “La ayuda humanitaria –explica– lanzada desde el cielo por Estados Unidos y otros países, así como la que llega por mar, no ha llegado a todos. No llegaron a la parroquia. Sin embargo, algunos fieles lograron encontrar algo de harina y la panadería volvió a hacer pan. Esta es una gran bendición para nuestros desplazados. El Patriarcado Latino también presta ayuda. Nuestra esperanza es que podamos volver a cocinar dos veces por semana". En este clima, ayer la parroquia celebró la festividad de San José, patrón de casi todos los grupos presentes en la parroquia.
“Nuestro grupo scout lleva el nombre de San José –afirma el párroco-. Le hemos pedido que interceda por la paz en Tierra Santa, por un alto el fuego inmediato. Oremos para que la próxima Pascua de Jesús caliente los corazones de los poderosos y los prepare para la paz y la convivencia".
Peligro de hambruna
Unicef ha vuelto a intervenir ante la grave situación humanitaria y, a través de su directora regional para Oriente Medio y el Norte de África, Adele Khodr, denuncia -sobre la base de la IPC (Clasificación Integrada de Fases de la Seguridad Alimentaria)- “una hambruna inminente. La falta de acción del mundo es impactante, ya que cada vez más niños sucumben a una muerte lenta. Todos los cruces fronterizos deben abrirse ahora para permitir el libre acceso de la ayuda humanitaria".
The IPC has today declared that half of the population of Gaza are experiencing catastrophic food insecurity. Famine is projected to occur imminently in the northern regions of Gaza. The Israeli authorities are using starvation as a weapon of war, and deliberately depriving… pic.twitter.com/nPbY5Y4BBK
— Oxfam (@oxfamgb) March 18, 2024
Oxfam también da la alarma y habla de "niveles catastróficos de hambre en Gaza". Para Paolo Pezzati, portavoz de crisis humanitarias de Oxfam Italia, "nunca antes habíamos asistido a una situación tan grave en un corto espacio de tiempo. En apenas unos días, la población del norte de Gaza se encontrará ante una auténtica hambruna, situación que muy pronto se producirá también en el sur sin un alto el fuego y una respuesta humanitaria adecuada. Muchos niños ya están muriendo de hambre mientras la comunidad internacional permanece inactiva. Mientras tanto, desde diciembre, el número de personas al borde de la hambruna casi se ha duplicado".
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