El obispo de Rumbek, preocupado por la violencia en Sudán del Sur Christian Carlassare: "El golpe de Estado llevaba tiempo en el aire"
"Hay mucha preocupación por lo que está ocurriendo (...). Todavía no sabemos qué va a pasar en Sudán"
El domingo por la noche, las fuerzas militares llevaron a cabo un golpe de Estado. Según medios internacionales, se han arrestado varios políticos, se han tomado las sedes de los medios de comunicación e interrumpieron el servicio de Internet en el país durante las protestas
"Se pensaba que este gobierno era laico, progresista y abierto a escuchar las demandas de la población. Fue un gobierno de unidad nacional y, por tanto, de preparación para un futuro más democrático"
"Se pensaba que este gobierno era laico, progresista y abierto a escuchar las demandas de la población. Fue un gobierno de unidad nacional y, por tanto, de preparación para un futuro más democrático"
Es una víctima directa de la violencia. El obispo electo de Rumbek, Christian Carlassare, quien el pasado mes de abril sufrió un atentado que estuvo a punto de acabar con su vida, que todavía hoy no ha podido regresar a Sudán del Sur, vive con tristeza y preocupación el golpe de Estado en el país. Un golpe que, asegura, "llevaba tiempo en el aire".
"Todo el mundo temía estos acontecimientos", sostiene Carlassare en una entrevista a Tv2000. "Hay mucha preocupación por lo que está ocurriendo (...). Todavía no sabemos qué va a pasar en Sudán".
El domingo por la noche, las fuerzas militares llevaron a cabo un golpe de Estado. Según medios internacionales, se han arrestado varios políticos, se han tomado las sedes de los medios de comunicación e interrumpieron el servicio de Internet en el país durante las protestas.
Con estos hechos se puso fin al proceso de transición democrática que comenzó con la caída del dictador Omar al Bashir. Al menos tres personas han fallecido y otras 80 han resultado heridas en las protestas en Sudán.
"Había mucha esperanza en el Gobierno recién formado", lamenta el misionero italiano. "Se pensaba que este gobierno era laico, progresista y abierto a escuchar las demandas de la población. Fue un gobierno de unidad nacional y, por tanto, de preparación para un futuro más democrático. En el interior del país, por desgracia, todavía había algunos grupos y restos de lo que había antes, personas leales a los gobiernos anteriores", advierte.
ss