"Si reza lo suficiente, ¿de dónde saca tanto temor?" ¿Qué teme Bernardito Auza? ¿Equivocarse? ¿Que le confundan con Stajánov?
"Mientras avanza la edad del Papa, dejar tantas diócesis huérfanas, ¿no es la mejor manera de difuminar su impronta espiritual?"
"Deje de proponer candidatos incoherentes con el vaticano II y verá como no se los rechaza quien debe rechazarlos"
"O Vd. no está hablando con los cristianos adecuados, o Vd. no está pidiendo las ayudas necesarias, o Vd. no está trabajando lo suficiente, o Vd. no está a la altura de las circunstancias y debe pedir un traslado inmediato en beneficio propio"
"O Vd. no está hablando con los cristianos adecuados, o Vd. no está pidiendo las ayudas necesarias, o Vd. no está trabajando lo suficiente, o Vd. no está a la altura de las circunstancias y debe pedir un traslado inmediato en beneficio propio"
| Inmaculada Vázquez
¿Para quien es mejor lo malo conocido (cada vez más diócesis sin responsable) que lo bueno por conocer (nuevos responsables diocesanos fieles al Vaticano II, incluso si no todos aceden luego al santoral)?
¿No teme el Nuncio del Papa en España que nos hagamos otro tipo de preguntas, como éstas: Mientras avanza la edad del Papa, dejar tantas diócesis huérfanas, ¿no es la mejor manera de difuminar su impronta espiritual, que no es sino la del Vaticano II? ¿Cabe mayor daño al Reino de Dios, que cerrar las puertas al Espíritu Santo, en un momento en que la caravana humana clama sin pausa por la luz, en medio de la noche?
Si el miedo al error se ha apoderado de la nunciatura apostólica, ¿a quién beneficia la incertidumbre resultante de ello dentro de la Iglesia, en este instante preciso?
¿Acaso debemos aceptar que las excusas, para dejar solo en este aspecto a Francisco, se resumen en que es imposible para el nuncio garantizar que un sacerdote competente, maduro emocionalmente, y coherente con el Vaticano II, no haya pecado en su pasado y nunca lo haga en su futuro, o que si alguno se aproxima, no puede el nuncio garantizar que, por su edad, sea un atleta?
Estimado D. Bernardito Auza, hay contradicciónes flagrantes en las excusas que, como las anteriores, rezuman desde el nº 46 de la Av. de Pío XII en Madrid.
Al respecto, tiene Vd. a su alcance lo que en España llamamos la prueba del algodón. O estamos en el momento de los grandes remedios y Vd. se olvida del paradigma de los obispos atletas, las pruebas de sangre y de los “cristianos viejos” como garantía de nada en la historia de España, y propone para el episcopado a presbíteros maduros emocionalmente, solventes moralmente y capaces cognitivamente, incluso si no tienen pasaporte español…. o Vd. asume ya el riesgo de que los que lo tienen, una vez designados, no sean capaces de toda la lucidez y toda la humildad necesarias para sanar pronto del todo de los males y pecados que, más o menos escondidos, nos diferencian del creador, y el de que le sean achacadas las consecuencias, aunque resultare en perjuicio de la carrera de Vd. Es Xto la única garantía de perdón y la vida eterna, deje de proponer candidatos incoherentes con el vaticano II y verá como no se los rechaza quien debe rechazarlos.
En caso contrario, o Vd. no está hablando con los cristianos adecuados, o Vd. no está pidiendo las ayudas necesarias, o Vd. no está trabajando lo suficiente, o Vd. no está a la altura de las circunstancias y debe pedir un traslado inmediato en beneficio propio. Racionalmente no hay más opciones, salvo una peor: Vd. está dando la espalda al vicario de Xto.
Piense que en nada beneficiaría a su carrera olvidar que hay motivos para creer que (quizá bajo los efectos de Isaías 66,19), Saulo de Tarso en Rom. 15, 24 y 28 nos da a entender que le sabía a poco lo anterior a ganar para Xto. Jesús, las almas de Hispania, que suyas no son, son de Él.