15 jóvenes murieron en el mar, en la frontera entre Marruecos y España Tarajal, diez años en el corazón de su gente

El dolor aún se vive en las calles de Ceuta, después desde que hace 10 años, murieran 15 jóvenes que emprendieron un largo viaje desde África, hasta España, para buscar un mejor futuro para su familia, pero, su sueño se vio frustrado al no ser recibidos de la mejor manera cuando trataron de ingresar por las turbulentas aguas del mar en la frontera, justo en Tarajal.

Sin recibir el menor apoyo de las autoridades militares, todos se resistían a que el mar los arrastrara, pero sus vidas se desvanecían hasta que un último suspiro, permitió que el mar se los tragara y los echara a tierra en plena soledad, la miseria y el abandono.

Para recordar esta tragedia y exigir a las autoridades verdad, justicia y reparación, vecinos de diferentes organizaciones de concentraron para desarrollar actividades y recordar aquel trágico y doloroso 6 de febrero de 2014, el que denominaron la VI Marcha por la Dignidad.

El pasado sábado, empezaron las actividades en conmemoración de las víctimas de Tarajal, y los mismos iniciaron en un emotivo acto en el centro IES Abyla, donde Patricia Fernández, en representación de la Coordinadora de Barrios, así como los activistas Mouctar Bah y Viviane Ogou, desarrollaron un debate, donde se expuso la problemática y el trabajo que vienen realizando para las víctimas de la frontera.

Recordar el dolor de las familias que quedaron solas en África, hizo que más de uno de los presentes dejara correr sus lágrimas, puesto que fue expuesto un video con los familiares, hijos y esposas, que compartían ese sueño de valentía, lucha y desprendimiento que hace que cada uno de los africanos, decida salir y buscar esa calidad de vida que merece todo ser humano.

Sin embargo, parece que en las fronteras los negros no tienen derechos, no tienen frio, ni hambre y la sangre que derraman no tiene el valor para la humanidad. Situación que hace que los colectivos sociales y familiares salgan a las calles para impulsar el valor y potenciar la dignidad de todo ser humano.

Durante el acto, Patricia Fernández hizo énfasis en la sensibilización para reflexionar sobre la realidad de la frontera y las causas que generaron la tragedia del Tarajal y así conmemorar las vidas de las personas fallecidas en la playa.

“Concebimos la tragedia del Tarajal, como el dolor que no cesa porque no solo asoló la vida de aquellos chicos, sino también de sus familias que no han podido recuperar los cuerpos de sus hijos. Es un dolor que no cesa porque no ha habido responsables y porque estas tragedias se siguen repitiendo cada vez que llega un cuerpo a las costas de Ceuta y no puede ser identificado”

De la misma manera resaltó, que no se puede hacer justicia en contra de las víctimas, ya que en el procedimiento no se escuchó a los supervivientes, no se permitió a las familias ser parte del mismo, no se recabaron las autopsias de Marruecos y las de España fueron deficientes, por lo que es necesario que se haga investigación a fondo para llegar a la verdad.

“Las víctimas migrantes importan, es importante que empecemos a concebir la importancia del testimonio de supervivientes y de esta manera se consolide una verdadera investigación efectiva y precisa, que conlleve una reparación a las víctimas.”, dijo Fernández.

Posterior al debate, se desarrolló una manifestación que dio inicio en la plaza de Los Reyes, de Ceuta, donde los grupos activistas y vecinos se concentraron para dar inicio a una gran marcha llena de civismo y emoción para recordar las vidas de los migrantes que buscan llegar a España, cargados de ilusión.

Las calles estaban repletas de manifestantes, mientras que los transeúntes observaban detenidamente el paso eufórico de los vecinos que con consignas exigían al gobierno español la verdad de los hechos, la justicia que merecen cada una de estas personas y la reparación del daño ocasionado.

Tras tres horas de recorrido, hasta llegar a la playa de Tarajal, se realizó un acto simbólico, para recordar a las víctimas que fueron tragadas por el mar y que pasaron a formar parte de la gruesa lista de personas arropadas por el agua (más de 6000 personas este último año, según Ca-Minando Fronteras), dejando sus cuerpos desvanecidos y sin ayuda de quien necesita para ver la vida más allá de las fronteras. 

En la playa, los manifestantes han exigido la reparación para las víctimas y todos aquellos que siguen muriendo en las fronteras españolas intentando encontrar una vida mejor. También encendieron una vela con el nombre de cada uno y por todos los desaparecidos en el mar.

Por último, a través del manifiesto han exigido que el Estado asuma su responsabilidad, para que los familiares de las víctimas puedan dar sepultura a sus hijos, que se promuevan relaciones justas con los países del sur global, que cese el uso de la violencia en las fronteras y que se reconozca el derecho a la libre circulación de todas las personas.

La Coordinadora de Barrios junto con la Asociación ELIN también acompañó a un grupo de vecinos para colocar las placas donde hay algunos cuerpos de los fallecidos en Tarajal y así demostrarle que aún no están olvidados y esperan justicia para que sus familiares puedan llegar y tocar la tumba donde yacen los restos de sus seres queridos.