Por segundo año consecutivo Francisco suspende los ejercicios espirituales con la Curia por la pandemia

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El papa Francisco volvió a suspender el tradicional retiro con los miembros de la Curia romana para celebrar los ejercicios espirituales de la Cuaresma "ante la persistencia de la emergencia sanitaria"

Precisamente, en esa semana se suspenderán todos los compromisos de Francisco, incluida la audiencia general del miércoles 9 de marzo

Justo esta semana, el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin, y el sustituto a la secretaria de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra, dieron positivo de coronavirus y se encuentran en cuarentena

El papa Francisco volvió por segundo año consecutivo a suspender el tradicional retiro con los miembros de la Curia romana para celebrar los ejercicios espirituales de la Cuaresma "ante la persistencia de la emergencia sanitaria", informó el Vaticano.

Por segundo año consecutivo, informó la oficina de prensa de la Santa Sede, debido a la emergencia sanitaria por el Covid, “no será posible vivir en comunidad los Ejercicios Espirituales de la Curia Romana en la Casa 'Divin Maestro' de Ariccia (a las afueras de Roma)”.

El papa invitó entonces a los cardenales residentes en Roma, a los Jefes de Dicasterio y a los Superiores de la Curia Romana "a realizarlos personalmente, retirándose a la oración, desde la tarde del domingo 6 hasta el viernes 11 de marzo".

Precisamente, en esa semana se suspenderán todos los compromisos de Francisco, incluida la audiencia general del miércoles 9 de marzo.

Justo esta semana, tanto el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, como el sustituto a la secretaria de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra, dieron positivo de coronavirus y se encuentran en cuarentena.

El cardenal italiano tiene molestias "muy leves", mientras que el arzobispo venezolano es asintomático, indicó la Oficina de prensa de la Santa Sede.

El papa, de 84 años, que recibió la dosis de recuerdo de la vacuna a finales de octubre pasado, cuando el Vaticano inició el suministro a los mayores de 60 años y a las personas frágiles, continuó normalmente con su actividad.

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