¡Feliz martes! Entre nuestros compositores obviamente los hay más conocidos y otros menos. El maestro de hoy pertenece al grupo de los primeros, pero posiblemente la obra de hoy no lo sea. Vamos a escuchar un pequeño fragmento de ella.

Nos visita hoy Isaac Albéniz (1860-1909), compositor español nacido en la localidad gerundense de Camprodón. Con un año lo trasladaron a Barcelona y casi con esa edad empieza a tocar el piano, aprendiendo rápidamente, pudiendo ya presentarse ante el público con cuatro años. Muchos recelaron de esa precocidad e incluso llegaron a pensar que otro pianista lo estaba doblando entre bastidores. Su padre lo obliga a practicar el piano todos los días, incluso a consta de su aprendizaje en lectura y escritura. En París estudia con Antoine-François Marmontel y quiere entrar al conservatorio pero no es admitido. Admiraba su capacidad para improvisar, algo que iría desarrollando aún más con el paso del tiempo. Con ocho años estudió en el conservatorio de Madrid y ya entonces empieza una gira de conciertos por toda España, causando admiración de todos.

En 1896 se estrenó su ópera en dos actos Pepita Jiménez, basado en la novela del mismo nombre de Valera y con un libreto escrito en inglés por Francis Money-Coutts. La acción se desarrolla en Andalucía y hace uso de numerosos elementos folklóricos andaluces. En el segundo acto canta un coro de niños la escena titulada Born into common humility, que es lo que vamos a escuchar hoy. Tiene todo ese encanto del canto de una escolanía y también de esos elementos populares de los que hace uso el compositor catalán, dando lugar a una página deliciosa.

La interpretación es del Coro de Niños de la Badalona y la Orquesta de Cámara del Teatre Lliure dirigida por Josep Pons.