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Vatican News).-
Los
jesuitas de Guatemala, reunidos en Asamblea Nacional el pasado 30 de julio,
se pronuncian ante “la preocupante situación nacional que se ha venido dando en los últimos meses.
Deterioro de la calidad de vida de la mayoría de guatemaltecos
Los jesuitas en Guatemala, expresan en el comunicado, su “preocupación el deterioro de la vida de la mayoría de las y los guatemaltecos, que se produce no solo por la crisis de la Pandemia sino por una crisis estructural que venimos sufriendo desde hace tiempo y se ha agudizado en estos últimos años”.
Poco interés de las autoridades por el combate a la corrupción e impunidad
Los religiosos de la Compañía de Jesús señalan: “Nos preocupa el deterioro y desinterés de las autoridades de gobierno y algunos sectores privilegiados del país, por el combate a la corrupción y la impunidad. Los acontecimientos recientes así lo evidencian”.
La destitución del fiscal
El comunicado valora la actuación del abogado Juan Francisco Sandoval, “quien se desempeñó con ejemplar valentía, ética y profesionalismo como titular de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) del Ministerio Público (MP)”. Los jesuitas añaden: “Queremos manifestar nuestra solidaridad con el ex fiscal pues su exilio forzado nos recuerda la Bienaventuranza de “los perseguidos por causa de la justicia”.
De igual manera indica que la actuación del Ministerio Público “es la última manifestación de la cooptación del Sistema de Justicia en nuestro país”. Califican al igual que los obispos del país, este hecho como ilegal y arbitrario.
Los religiosos hacen eco de la preocupación de la Conferencia Episcopal de Guatemala, que consideraba este hecho como “un retroceso en la búsqueda de la verdad y la transparencia y allana el camino para la corrupción y las alianzas criminales”.
Un creciente descontento popular
El comunicado patentiza como “El descontento popular crece día con día frente a un gobierno indolente a las necesidades de los empobrecidos, así como a una ineficiente gestión de la pandemia que ya ha cobrado la muerte de más de 10,000 personas, mientras un oscuro contrato de vacunas involucra a altos funcionarios públicos, incluyendo al mismo Presidente de la República”.
En el mensaje se pone en evidencia la tendencia a criminalizar a todo aquel que pida justicia, así como “Se ha reavivado un discurso de odio y confrontación, cuya única intención es dividir y confundir a la población, tal como sucedió durante el gobierno anterior”.
El diálogo como solución
Ante esta realidad del país, los jesuitas invitan a todos los sectores del país a “dialogar y unirse en una causa común: la construcción de un país sin corrupción en el que reinen la verdad y la justicia”.