Es primera vez que una mujer ocupa este cargo en la curia porteña García Cuerva designa a María del Pilar Olveira Brun canciller del obispado de Buenos Aires
Se trata de la abogada María del Pilar Olveira Brun. Fue designada para el cargo por monseñor Jorge García Cuerva, quien dejó así conformada la Curia Eclesiástica porteña
En la comunicación, se cita una párrafo de la exhortación apostólica Evangelii gaudium, en la que el Papa Francisco afirma: "Sueño con una opción misionera capaz de transformarlo todo…"
Con este nombramiento, la curia eclesiástica queda conformada así: Vicario general: Mons. Gustavo Carrara; provicario general: Mons. Joaquín Sucunza; moderador de la Curia: Pbro. Dr. Alejandro Russo; notario general: Pbro. Lic. José María Zivano; canciller: abogada María del Pilar Olveira Brun
Con este nombramiento, la curia eclesiástica queda conformada así: Vicario general: Mons. Gustavo Carrara; provicario general: Mons. Joaquín Sucunza; moderador de la Curia: Pbro. Dr. Alejandro Russo; notario general: Pbro. Lic. José María Zivano; canciller: abogada María del Pilar Olveira Brun
(AICA).- Se trata de la abogada María del Pilar Olveira Brun. Fue designada para el cargo por monseñor Jorge García Cuerva, quien dejó así conformada la Curia Eclesiástica porteña.
Monseñor Jorge Ignacio García Cuerva designó canciller del Arzobispado de Buenos Aires a la abogada María del Pilar Olveira Brun, la cual se convirtió así en la primera mujer en ocupar ese cargo en la curia porteña.
Con este nombramiento, la Curia Eclesiástica quedó conformada de esta manera:
Vicario general: Mons. Gustavo Carrara
Provicario general: Mons. Joaquín Sucunza
Moderador de la Curia: Pbro. Dr. Alejandro Russo
Notario general: Pbro. Lic. José María Zivano
Canciller: abogada María del Pilar Olveira Brun
En la comunicación, se cita una párrafo de la exhortación apostólica Evangelii gaudium, en la que el Papa Francisco afirma: "Sueño con una opción misionera capaz de transformarlo todo, para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se conviertan en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual más que para la autopreservación. La reforma de estructuras que exige la conversión pastoral sólo puede entenderse en este sentido: procurar que todas ellas se vuelvan más misioneras, que la pastoral ordinaria en todas sus instancias sea más expansiva y abierta, que coloque a los agentes pastorales en constante actitud de salida y favorezca así la respuesta positiva de todos aquellos a quienes Jesús convoca a su amistad".
Asimismo, en el mensaje se pide, por la intercesión de San Martín de Tours, patrono arquidiocesano, que “el espíritu de la curia esté siempre animado por una pastoralidad y espiritualidad de servicio y comunión para toda la arquidiócesis”.
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