La educación es el arma más poderosa de la que disponen las familias, personas y países para poder desarrollarse Monseñor Ramón Castro: México vive una emergencia educativa
Castro visualiza a la educación centrada en la persona como la única y verdadera solución de fondo a la situación de violencia que vive México.
La Iglesia Católica puede tener un papel clave en “promover colaboración de Gobierno y sociedad por la educación, apoyar la formación de formadores en escuelas y universidades”, enfatizó.
Jimena Hernández corresponsal en México
El actual secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y Obispo de Cuernavaca, Mons. Ramón Castro Castro en entrevista para la cadena EWTN Noticias, expresó como la educación es la base primordial para el desarrollo integral de las personas y el arma más poderosa para el avance de los países.
Castro Castro, enfatizó que es la educación una tarea fundamental de la familia como un deber necesario para el Estado. México, afirma el obispo de Cuernavaca, “vive una emergencia educativa como todo el mundo, agravada ahora por la pandemia tal y como lo hemos ya señalado los obispos en el documento de la Conferencia Episcopal ‘Educar para una nueva sociedad’”.
“Ahí se nota que prevalece la desigualdad, una desigualdad social, el desempleo, la pobreza, la inseguridad, la informalidad laboral, el asistencialismo, la marginación de grupos vulnerables y una falta de conocimiento y de vivencia de la fe cristiana, por desgracia”.
El secretario general, visualiza a la educación centrada en la persona como la única y verdadera solución de fondo a la situación de violencia que vive México. Y recuerda como es que “el Papa Francisco ha propuesto un nuevo pacto educativo global, y ha insistido recientemente en la reunión con distintos representantes del sector educativo en la centralidad de la persona”.
Además, indicó, el Santo Padre ha resaltado la importancia del “reconocimiento de la participación de los padres como garantes (...) de las tradiciones y valores y de los hijos como depositarios de éstos valores, en especial el servicio, la generosidad, el respeto bases de las solidaridad y de la paz tan anhelada.”
Reconoció que es importante la asignación de presupuesto para la correcta implementación, la profesionalización del sector y el compromiso de una comunidad, así como libros de texto centrados en las ciencias de la realidad y en los valores trascendentales, universales y libres en toda ideología, pero “ni la comunidad , ni los libros y los recursos didácticos serán más importantes que centrar la educación de la dignidad humana” expresó.
Es así que la Iglesia Católica, afirma Monseñor Castro, puede ayudar a que la educación en México sea precisamente más humana “reclamando a tiempo y a destiempo la importancia de una educación en sentido trascendente “.
Para ello, propone una serie de acciones como las del pacto educativo global que el Papa Francisco ha insistido, como herramientas que ayuden a gestionar la crisis educativa mundial; así como impulsar las que la Conferencia Episcopal ha plasmado en el documento Educar para una nueva sociedad; por otro lado, el impulso a la agenda de las dimensiones de la educación y cultura en las diócesis más allá de las escuelas católicas; la colaboración de gobierno y sociedad por la educación “y mirar a Cristo y a María como inspiración y plenitud del proyecto educativo de la Iglesia”, concluyó.
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