Tuvieron una cordial conversación en la que destacaron la aportación de la Iglesia en el país caribeño El Papa recibe al primer ministro de Belice, John Briceño
John Briceño recibido en el Palacio Apostólico Vaticano con la delegación: 25 minutos de conversación con el Pontífice
Encuentro con monseñor Gallagher en la Secretaría de Estado, centrado en el compromiso de la Iglesia católica en el ámbito de la educación y en favor de los migrantes y en las cuestiones sociopolíticas de actualidad en el país
(Vatican News).- Ha durado 25 minutos la conversación privada que el Papa Francisco ha mantenido esta mañana, sábado 20 de abril, con el Primer Ministro de Belice, John Briceño, recibido en audiencia en el Palacio Apostólico Vaticano junto a su esposa y séquito.
Intercambio de regalos
Al final del diálogo, a puerta cerrada en la Sala de la Biblioteca, tuvo lugar el habitual intercambio de regalos. El Papa regaló al Primer Ministro Briceño un bajorrelieve de bronce titulado "El cuidado de la Creación", junto con volúmenes de documentos de su Magisterio, el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de este año y el libro sobre la Statio Orbis del 27 de marzo de 2020, editado por la LEV. Por su parte, el Primer Ministro obsequió al Pontífice con un óleo de un artista beliceño.
Las conversaciones en la Secretaría de Estado
Tras el encuentro con el Pontífice, Briceño y su delegación se trasladaron a la Secretaría de Estado, donde Briceño se reunió con Monseñor Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales. Durante las cordiales conversaciones en la Secretaría de Estado, informa una nota de la Oficina de Prensa vaticana, "se expresó satisfacción por las buenas relaciones entre Belice y la Santa Sede.
Se hizo especial hincapié en el compromiso de la Iglesia católica en el campo de la educación y la atención a los migrantes". "En la continuación de la conversación", informa además el comunicado, "se discutieron algunas cuestiones sociopolíticas actuales del país, subrayando la contribución que la Iglesia católica y los valores cristianos, presentes en la sociedad beliceña, pueden ofrecer al bien común de la población".
