Mons. Cabrera pidió que se unan fuerzas entre todos los sectores de la sociedad para salir de esta crisis educativa Es urgente detener la ruptura que existe entre escuela y familia para salir de la crisis educativa que se vive en México: Presidente del Episcopado Mexicano

“Todos tenemos que asumir la responsabilidad de acabar con la terrible crisis educativa que vivimos”, aseguró Mons. Rogelio Cabrera López, Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), durante su presentación en el programa de “Diálogos de Esperanza”. 

Mons. Cabrera, aseguró que el tema de la educación ha sido asumido por la Iglesia desde siempre, pero de manera especial en el Concilio Vaticano II, donde se asume la gravedad del momento de la educación y más tarde el Papa Benedicto XVI, asegura que existe una “emergencia educativa”, por lo cual ahora el Papa Francisco ha invitado a enfrentar este gravísimo momento con un pacto global. 

El Arzobispo mexicano, hizo un llamado a las autoridades a escuchar a las madres y padres de familia, para fortalecer ese método educativo que hace unos años funcionaba donde la escuela era la continuación de la formación que se daba en casa, y no existía la ruptura que hoy en día existe. 

“Me gustaría que las autoridades educativas de cualquier país, escucharán con atención a todas las partes, de modo especial a los padres de familia, creo que si el esquema de educación es solo de contenidos pues quedan descartados los papás. Y yo creo que la escuela debe mejorar sus ambientes y sobre todo motivar la convivencia” .Pero también aseguró que si cada sector de la sociedad recompone su propio espacio se puede salir de la crisis. “Es necesario que las familias se recompongan, que el Estado también se recomponga, porque el estado sufre las crisis de la gobernanza y la gobernabilidad y lo mismo también las escuelas; creo que todas las instituciones necesitan también recomponerse porque si las partes están bien la totalidad estará mejor”

Durante la charla, en la cual también participó el Hno. Dr. Juan Antonio Ojeda Ortiz, consultor de la Congregación para la Educación Católica, el presidente del Episcopado Mexicano destacó que aunque la llegada de las nuevas tecnologías ha sido importante, su uso nos ha superado. “Con las niñas y niños se ha confundido la información con la formación y ahora nos encontramos ante esta crisis de la información, ya cualquiera más o menos la puede encontrar en un buscador de google o de alguna otra plataforma pero no basta tener la información, hay que saber qué hacer con la información”. 

“La información corre el peligro de ahogar la mente y dañar los sentimientos, porque la persona se siente inundada por tanta información, a la cual no puede darle unidad, ni puede darle asimilación”, señaló. Por lo que dijo que lamentablemente vivimos un momento en el que la parte emocional se encuentra dañada “ya sea por una tristeza profunda que tienen muchos niños y jóvenes, ya sea por el dolor de la agresividad y la violencia que rodea a las familias”

“Hay mucha agresividad en las escuelas, lo que acá se llama el bullying que le quitan a los jóvenes las ganas de estar juntos o por lo tanto ellos se separan en pequeños grupos y se convierten en pandillas para defenderse unos de otros”.

Ante estas situaciones, Mons. Cabrera comentó que es importante revivir toda la parte lúdica y del deporte en México, ya que hoy los niños y los jóvenes se han vuelto sedentarios “atendiendo solamente a las redes sociales”, por lo que se está gestando una sociedad enferma físicamente con la cual también se corre el riesgo de aumento de adicciones. Además sugirió que los padres de familia también deben buscar que sus hijos tengan formación espiritual, para fortalecer las virtudes del amor, la esperanza y la caridad. 

“Respetando la laicidad de las escuelas, los papás tienen que inteligentemente buscar la manera de que sus hijos reciban la formación espiritual, no basta saber, no basta tener conocimientos, se requiere humanizar y humanizar significa tener sentimientos los más sanos los más humanos, especialmente, tener amor, esperanza y caridad”. 

La fuerza de la educación nos ayudará a salir del aislamiento y la fragmentación: Obispos mexicanos

En este mismo tener, pero mediante un video, el presidente de la CEM, señaló que están conscientes que “la fuerza transformadora de la educación en la libertad y la participación es asunto de toda la comunidad educativa la fraternidad la reconciliación y la paz que deseamos se puede construir día a día desde el dinamismo educativo en nuestras casas y en las escuelas con la participación libre y organizada de toda la comunidad educativa”.

Aseguró que después de que todos los obispos mexicanos reflexionaran y dialogaron con diversos actores de la vida social dedicados a la educación, “reiteramos nuestro compromiso con las innumerables tareas educativas y hacemos un llamado a todos, a cada uno, pero de modo especial a los padres de familia, a ustedes los alumnos y las alumnas, a las maestras y maestros a participar con la mayor seriedad y prontitud en respuesta a este gran desafío”. 

“Estamos convencidos de que sólo a través de la educación integral podemos salir del aislamiento, de la fragmentación y de los conflictos que afectan a nuestra sociedad y lastiman a cada persona. Deseamos para todos que la vida social sea cada vez más integral, más plena y más alegre”